Durante casi 15 años, un enterramiento fenicio de los siglos VI-IV antes de Cristo ha permanecido oculto y escondido en la tercera planta subterránea del aparcamiento de La Alcazaba, en el mismo Centro histórico de Málaga. Pero la larga noche que pesa sobre este importante hipogeo, desenterrado durante la construcción del parking, está tocando a su fin.

Tras años de indecisión de todos los actores implicados, la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Smassa) se ha puesto manos a la obra y ha activado los mecanismos para mejorar las condiciones de conservación del hallazgo y ponerlo en valor, convirtiéndolo en punto de atracción de la historia de la urbe.

En esta apuesta por recuperar la asignatura pendiente, la empresa mixta (51% de capital municipal) encargó meses atrás a la empresa Yamur Arquitectura y Arqueología una propuesta de análisis e intervención sobre el enterramiento. Documento que recientemente ha sido remitido a la Gerencia de Urbanismo para su estudio, con el objetivo de que, acto seguido, sea enviado a la Delegación de Cultura para que emita el correspondiente informe.

Es el organismo autonómico el que, en definitiva, tiene la última palabra a la hora de validar la operación de rescate del hipogeo. Y tanto del sentido del informe como de la rapidez del mismo dependerá que pueda acometerse en un plazo más o menos breve las obras previstas.

El proyecto, fechado el pasado 14 de abril, es fruto del trabajo de los arquitectos malagueños Salvador García Villalobos y Pedro Gurriarán, así como del restaurador Carlos Núñez Guerrero. Los especialistas ponen en valor la oportunidad que representa su acondicionamiento como herramienta para la difusión de la historia de Málaga. 

Ejemplo de monumento funerario

"El conjunto resultante es un espacio atractivo desde el que se preserva al yacimiento arqueológico y a su vez se transmite una información, estableciendo el necesario vínculo entre el bien y la sociedad", apuntan en la propuesta, en la que subrayan el "papel singular" que tiene "como ejemplo de monumento funerario propio de la cultura fenicia en Málaga o la cultura funeraria histórica, así como su integración en la dinamización patrimonial del Monte Gibralfaro".  

Con esta base de partida, el plan inicial planteado por Smassa, según indican desde la empresa, dispone de dos fases. La primera de ellas está centrada en mejorar sustancialmente las condiciones de conservación de los restos. Lo que pasa inevitablemente por sanear el bien de los deterioros sufridos, no sólo por el paso del tiempo, sino también por el impacto de las humedades y las filtraciones de agua en el interior del aparcamiento. Para ello, se desviará el agua que viene canalizada a través de los muros pantalla, de modo que se evite que la misma caiga sobre el hipogeo.

La segunda etapa de la actuación afecta a la puesta en valor del bien. Y ello incluye la creación de una especie de habitáculo en cuyo interior quedará el hipogeo. "Se plantea el cerramiento de los laterales contra los muros pantalla y la colocación en la parte frontal de una barandilla de acero y cristal, así como un atril en el que se explicará todo lo que es el hipogeo", informan desde Smassa. Todo ello acompañado de una iluminación especial.

De acuerdo con los plazos manejados, desde el momento en que Cultura dé el visto bueno y Smassa licite los trabajos, su materialización podría ser una realidad en poco más o menos un mes o mes y medio. No obstante, las fuentes recalcan que cualquier previsión depende del aval de Cultura.

Desenterrado durante las obras del parking

El proyecto de Yamur incluye una referencia a los antecedentes del hallazgo, que tuvo lugar durante la vigilancia arqueológica de las obras de construcción del aparcamiento de La Alcazaba. La aparición del enterramiento subterráneo de época fenicia "parcialmente destruido", motivó la realización de una excavación "de urgencia" que trató de poner en claro el alcance de los restos conservados.

En el curso de estas tareas, se documentó el monumento funerario, orientado en sentido este-oeste y construido principalmente mediante obra de mampostería. "El acceso al interior de la cámara funeraria, situado al este del hipogeo, estaba conformado por sillares de calcarenita", precisan los especialistas, que apuntan que estas características "permitían ponerlo en relación con otros enterramientos fenicios del sur peninsular". 

En el interior del hipogeo se excavaron cuatro enterramientos de inhumación, dos de ellos superpuestos en la misma fosa. Los importantes ajuares asociados permitieron datar la deposición más antigua en el siglo VI a. C. y la más reciente en el siglo IV a. C. "El monumento estuvo en uso durante, al menos, dos siglos", destacan. 

Y advierten de la relevancia del descubrimiento, al ser el primer enterramiento de este tipo y época hallado en la capital malagueña, así como por la antigüedad de su construcción y la variedad de técnicas constructivas empleadas. 

"Su localización confirma la extensión y distribución de los distintos ámbitos de la urbe fenicia y aporta nuevos datos sobre la colonización, la existencia de diferencias sociales o estamentos, además de aportar información sobre los credos y prácticas funerarias de los colonizadores", indican en el documento técnico.

En el mismo, apostillan que su conservación in situ representa "su principal valor en lo que respecta a su protección, entendida como la conservación material del bien, la difusión social del hallazgo y su preservación, dada su relevancia como documento material de uno de los periodos más significativos de la historia de Málaga, su fundación como urbe y ser parte de su desarrollo urbano y social como colonia fenicia". 

Noticias relacionadas