La Policía Local de Málaga ha arrestado a un joven de apenas veinte años por su presunta relación con un robo con violencia en la calle y a plena luz del día a una mujer de 36 años.

La mujer iba caminando por la calle haciendo una videollamada cuando el presunto autor aprovechó su estado relajado para robarle de un tirón el dispositivo. Era la una de la tarde y el joven le sustrajo el teléfono móvil en calle Montaño. Así, en el momento del tirón, este le propinó un golpe en la cara para conseguir que la víctima no le captara tras huir a la carrera.

La víctima comenzó a gritar que le habían robado el móvil por si alguno de los viandantes de la zona pudiera frenar al caco. Casualmente, por la zona se encontraban dos agentes de paisano que, al oír a la mujer, procedieron a darle el alto policial al ladrón, que hizo caso omiso y salió corriendo hacia plaza Montaño y calle Guerrero. 

Los agentes trataron de perseguirlo, también a pie, sin perderlo de vista en ningún momento y percatándose de cómo se deshacía del teléfono móvil arrojándolo al suelo a la entrada de calle Gaona. A la altura de calle Chinchilla y fruto de los nervios al oír el "¡Alto, Policía!" el joven se cayó hasta en dos ocasiones subiendo unas escaleras, siendo finalmente interceptado por uno de los agentes, quien lo detuvo. El otro, que fue a recuperar el móvil sustraído, acudió a darle apoyo segundos después.

Los agentes acompañaron a la víctima al lugar, donde reconoció al joven como autor del robo de su móvil, que le devolvieron los agentes en calidad de depósito judicial. La mujer aseguró que acudiría, además, a Urgencias para recibir asistencia médica por las lesiones sufridas debido al golpe que el individuo le había propinado en la cara.

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