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Dean Huijsen (20 años) nació en Holanda, pero es marca Marbella. Pura y dura. Así se encarga de demostrarlo cuando puede, y ahora el escaparate es uno de los mayores del mundo, el Real Madrid y la selección española. Ahora, es profeta en su tierra.

La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, recibió en el Ayuntamiento al futbolista del Real Madrid y de la selección española, considerado uno de los defensas con mayor proyección del panorama europeo. Allí, Huijsen le ha hecho entrega de una camiseta del conjunto blanco y otra de la selección española.

Por su parte, Huijsen se mostró agradecido por el reconocimiento y expresó su compromiso con la ciudad al señalar que “para mí es un orgullo estar aquí, en mi casa y representar a Marbella en el fútbol y ojalá los niños de aquí puedan divertirse jugando, seguir sus sueños y llegar lejos también”.

El futbolista no dejó de aprovechar la ocasión para demostrar de nuevo lo que siente por la ciudad de la Costa del Sol: “siempre digo que cuando me retire, quiero volver a vivir a Marbella”.

Huijsen hace gala de malagueño y marbellí por donde va, la regidora destacó “la vinculación estrecha del deportista con nuestra ciudad, donde ha crecido y dado sus primeros pasos en el mundo del fútbol, y de la que se siente profundamente parte”.

Asimismo, ha subrayado que “cuando Dean habla de Marbella lo hace como su casa, donde comenzó a desarrollar su gran talento y donde mantiene sus raíces”. “Empezó a jugar al fútbol aquí, en el club Costa Unida, y desde entonces su carrera ha sido meteórica, primero en el Málaga, luego en Italia e Inglaterra y ahora en uno de los clubes más importantes del mundo”, apuntó Muñoz.

“Para nosotros es un orgullo que alguien con su proyección lleve con tanto cariño el nombre de nuestra localidad allí donde va", cerró la alcaldesa.

Huijsen, hijo de un exfutbolista holandés, nació en Holanda y a los cinco años llegó a Marbella para quedarse. Empezó a jugar en el Costa Unida de San Pedro de Alcántara hasta que el Málaga CF lo fichó en categoría alevín.

Siendo juvenil la Juventus de Turín le echó el lazo. Jugó cedido en el Roma antes de ser traspasado al Bournemouth, donde en tan sólo una temporada despertó el interés del Real Madrid, que este verano se hizo con sus servicios y ya ha jugado de blanco el Mundial de Clubes en Estados Unidos.

Huijsen ya ha sido convocado con la Selección Española tras haber renunciado a jugar con Países Bajos.

Cada vez que vuelve a casa no duda en pasarse por La Rosaleda para ver al Málaga si la ocasión se lo permite.

Ahora, con toda la carrera por delante, ya es profeta en su tierra.