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El universo de Danny Zuko y la inocente Sandy Olsson está a punto de desembarcar en el Teatro del Soho CaixaBank de Málaga. Este 24 de enero, el musical de Grease llega al auditorio de Antonio Banderas con prácticamente todas las entradas vendidas. La obra supone el retorno al teatro musical del actor Adrián Lastra tras siete años fuera de las tablas, a las que vuelve encarnando a Vince Fontaine, un personaje que actúa como maestro de ceremonias y que tiene mucho más protagonismo en el musical que en la propia película. 

"Esto ha sido un gustazo, me lo paso fenomenal en el escenario", declara Lastra, en conversación telefónica con EL ESPAÑOL de Málaga, agradecido por el reto que le ha planteado el director David Serrano, al que conoce de hace muchos años. "Es trabajar con un amigo", dice. El pasado verano tuvo un importante accidente de moto del que poco a poco se va recuperando. "Justo acabo de salir de una rehabilitación, ya queda menos, pero estoy mejor", dice.

Lastra no oculta su emoción por regresar al teatro musical tras casi una década. Aunque admite que el training requerido para el género es exigente, lo describe como "la mili del mundo artístico". “No es lo mismo enfrentar este tipo de retos con 21 años que con 40, pero la disciplina y el esfuerzo físico son parte del encanto del teatro musical, gajes del oficio”, afirma.

Precisamente Lastra está rodeado de chavalería en el musical. El director ha decidido que los actores tengan la edad real de los personajes, pese a que normalmente en las adaptaciones de Grease siempre se encarnaba a los protagonistas con perfiles más adultos.

"Tener a gente tan joven aporta frescura y es un regalo de David, más que nada porque me he dado cuenta de que las nuevas generaciones vienen preparadísimas. Tengo que poner en valor el curro que hace Quique Niza [Danny Zuko]. Creo que este chico si hubiera nacido fuera, en Estados Unidos, sería una gran estrella. Es buenísimo y tiene una luz especial. Canta del carajo, baila, tiene una verdad interpretativa tremenda", sostiene Lastra.

Lamenta que hace veinte años apenas existían las academias de teatro musical. "Hay talento, pero todo ha evolucionado, no es lo mismo la interpretación de hace treinta años a lo de hoy. Antonio Banderas está ayudando mucho a esto", dice, poniendo en valor el trabajo del malagueño.

Así, destaca el espacio Sohrlin. "Lo de los actores en el Soho está fenomenal, pero me ha encantado descubrir que ha montado una escuela para los técnicos. España necesita crear industria y así es como se hace, teniendo técnicos de luz, de sonido...", dice.

Interpretar a Vince Fontaine es para Lastra una oportunidad de conectar directamente con el público. “Es un personaje híbrido, entre un maestro de ceremonias y un narrador, que rompe la cuarta pared de forma natural. Me encanta la libertad y la naturalidad que me permite tener para crear una relación especial con los espectadores”, explica.

Ser actor de musicales

Sobre la situación actual del teatro musical en España, Adrián reconoce que el cansancio y las siete u ocho funciones semanales "no te las quita nadie", al igual que "cuando llegas a una serie no ruedas y te vas, sino que puedes tener esperas de hasta seis o siete horas 'muertas'": "Pero esto es así, depende del requerimiento que tengas, pero si no quieres estar reventado y no tener vida, no te dediques al teatro musical. Pero ya sea aquí en España o sea en Londres. En Londres, la gente está haciendo 8 funciones a la semana, funciones a las 2 de la tarde en Broadway, y presentaciones a las 8 de la mañana con el Good morning, America".

Asegura que cuando uno "llega a los 40", en el mundo de la interpretación te mueve "poder hacer lo que te hace feliz". "Reconozco que me da rabia cuando te encasillan y no te valoran el hecho de ser actor de musicales. A mí no me ha pasado, pero hay directores de casting que ven que eres actor de musicales y no te quieren.  ¡Tenemos disciplinas muy completas y somos capaces de adaptarnos a diferentes registros! Aún queda camino por recorrer", lamenta.

Para Lastra es un orgullo que la gente le siga reconociendo por su trabajo en Hoy no me puedo levantar, algo que es más habitual que suceda por trabajos audiovisuales. "Le debo mucho a ese musical igual que a Dani Sánchez Arévalo por Primos", sostiene, demostrando que no olvida al actor que salió de Vallecas sin renglones en su currículum interpretativo.

El actor reconoce que en esta profesión está todo el rato buscando una aguja en un pajar. "Hoy estás, mañana no. Es todo súper efímero y nunca sabes realmente por dónde te puede venir la oportunidad. Hay veces que un surfista coge olas cada veinte segundos y hay otras donde no hay olas y si acaso estas aparecen tres o cuatro meses, si no más, pues igual nosotros", añade.

Sin consejos ni prejuicios

No es hombre de dar consejos. Dice que para ello está una Aitana Sánchez-Gijón o una Ángela Molina. "Yo no soy nadie", dice con rotundidad. Sin embargo, confiesa que es de los que creen que "la ola está para pillarla", y más en una profesión donde "el 99,99% son noes". Por ello no ha dicho que no a proyectos televisivos como El desafío o Bailando con las estrellas.

"Mi época fue súper clasista con los actores. El que hacía cine no hacía tele y el de teatro no hacía cine. Hoy, afortunadamente, está todo mezcladísimo. Si alguien que trabaja en redes hace una serie, ¿por qué yo no voy a hacer tele y encima una cosa artística? Yo me digo mucho eso de 'Hazlo, Adri, nadie te va a juzgar'", declara.

Sobre todo porque asegura que en 2025 que estamos, cada vez tenemos "la memoria más corta". "Éxitos como el de La casa de papel no se van a repetir, sobre todo porque el éxito ya dura muy poco. Antes el éxito de una serie se alargaba durante meses porque los capítulos iban semana a semana. Ahora, con tantos inputs y que la gente se hace maratones de un día, tenemos éxitos cada tres días que te dan de comer cuatro días, lo que la gente, como mucho, tarda en verlos", dice.

Cuando se le pregunta sobre con qué sueña, Lastra lo tiene claro: "Cada día sueño con algo distinto. Hoy te digo que me apetece muchísimo hacer una peli de acción, pero quizá si mañana hablamos, te digo algo distinto". Más allá de ello, para él, el secreto del mundo interpretativo está en disfrutar del proceso. “Al final, lo importante es ser feliz cada día con lo que haces. Yo solo quiero seguir disfrutando del teatro y de todo lo que venga”, concluye.

Sobre Grease, el musical

Después de más de 3 años desde su estreno en Madrid y tras una exitosa gira y ser aplaudido por más de 400.000 espectadores, Grease, el musical se representará en Málaga 4 únicas semanas, del 24 de enero y hasta el 16 de febrero de 2025. 

La nueva superproducción cuenta con la dirección de David Serrano, la dirección musical de Joan Miquel Pérez, coreografías de Toni Espinosa, escenografía de Ricardo Sánchez Cuerda, luces de Juanjo Llorens, sonido de Gastón Briski y vestuario de Ana Llena. 

El elenco de Grease, el musical está encabezado por Quique Niza (Danny); Mia Lardner (Sandy) y Adrián Lastra (Vince Fontaine), entre otros. La versión y adaptación de las canciones corresponden a Alejandro Serrano y David.

Las entradas ya están a la venta en El Corte Inglés, puedes acceder al enlace directo desde la web oficial del Teatro del Soho, aunque quedan pocas a la venta.