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Los estragos de las lluvias provocadas por la dana del pasado noviembre de 2024 siguen presentes en la pedanía de Barranco del Sol (Almogía). Sus vecinos aseguran que en la zona existen “problemas graves y persistentes que afectan a la salud, la seguridad y la movilidad”.

Los vecinos tienen problemas con el suministro de agua, las carreteras no están en buen estado, debido a los desprendimientos causados por las últimas tormentas.

En este sentido, según han informado desde la Asociación de Vecinos de Barranco del Sol (Almogía) a través de un comunicado, desde el pasado mes de noviembre, están inutilizados por barro uno de los dos depósitos que abastecen a la zona.

Venimos sufriendo cortes continuos de suministro, cada vez más frecuentes y prolongados, especialmente durante el verano”, sostienen. Los cortes superan en ocasiones las 48 horas y se producen sin previo aviso.

Por lo que las familias, personas mayores, negocios y propietarios de segundas residencias se ven “gravemente” afectadas, sobre todo en verano, ya que la población se duplica durante estos meses.

Cuando se restablece el servicio, “la red se llena de aire que no solo provoca averías en los hogares y en la infraestructura, sino que además se cobra como si fuera consumo real, al pasar por los contadores”.

Desde la empresa suministradora, Aguas de los Verdiales S.A., y el propio Ayuntamiento de Almogía, aseguran que se les aseguró que la instalación de una nueva tubería solucionaría la situación. “No ha sido así. Seguimos igual o peor”, añaden.

En cuanto a la carretera que les comunica con Casabermeja, inciden en que se encuentra “en un estado lamentable en el tramo que pertenece a Almogía”. Según aseguran, su tramo no tiene quitamiedos, tiene grandes agujeros “que provocan averías constantes y ponen en peligro a conductores y peatones”.

Esta vía, además, es transitada diariamente por un autobús escolar, lo que agrava nuestra preocupación ante la inminente vuelta al colegio en septiembre”, explican.

En este punto, remarcan que el Ayuntamiento les informó que la licitación de las obras estaría lista antes del verano, pero recientemente les han comunicado que ni siquiera ha sido licitada aún, debido a diversos retrasos administrativos.

Asimismo, hacen hincapié en que a esta situación se suma que en otra zona de la pedanía, la carretera sufrió desprendimientos durante las fuertes tormentas de este año.

Esto ha provocado estrechamientos peligrosos y riesgo de aislamiento para toda la pedanía con la llegada de la época de lluvias, además de incrementar los riesgos para quienes circulan por esa vía”, apuntan.

Por ello, exigen a las administraciones competentes “soluciones y que actúen con urgencia y responsabilidad” porque estos problemas “están generando una situación insostenible”.