Málaga

La vicepresidenta del Gobierno, ministra de Trabajo y lideresa de Sumar, Yolanda Díaz, ha estado este lunes de campaña en Andalucía. Esta mañana ha defendido a sus candidatos en Sevilla y esta tarde ha hecho lo propio en Málaga en un auditorio del Palacio de Ferias que estaba lleno y al que han acudido personajes históricos de la izquierda malagueña, andaluza y española como Antonio Romero. 

Díaz ha recordado las figuras de dos malagueñas ilustres como Victoria Kent y María Zambrano, dos ejemplos de libertad y de lucha, y ha atacado al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla (PP), por dos frentes. Primero, por el medio ambiental. "Estoy asombrada con lo que está haciendo el PP en Andalucía. La mejor definición del efecto Bonilla es la devastación de Doñana", ha precisado Díaz, quien ha subrayado que "quien no cuida la vida y el planeta no puede gobernar nada". 

El segundo frente ha sido el de la vivienda. O, más bien, la falta de ella y sus altos precios. En este sentido, la vicepresidenta del Gobierno ha afirmado que "quiero que Moreno Bonilla diga que va a aplicar la ley de vivienda, que va a regular el precio del alquiler en una ciudad como Málaga en la que es imposible vivir". 

Díaz también ha hecho una defensa a ultranza de la sanidad pública, ha pedido una mayor inversión en atención primaria y ha reclamado que se incluya la salud bucodental o la óptica. También ha pedido más atención a la salud mental. 

Toni Morillas durante su intervención.

La ministra ha puesto por las nubes a Toni Morillas, candidata número 1 a la alcaldía de Málaga capital por Con Málaga, la confluencia de varios partidos liderados por Podemos e IU. "Es una mujer dulce, a la que quiero y representa la esperanza", ha comentado. 

Morillas, en su discurso, que ha cerrado el acto, ha recordado la figura de Julio Anguita con su "programa, programa, programa", ha hecho hincapié en que "no quiere fondos buitres en los barrios" y también ha incidido en el tema de la vivienda y en el de la sostenibilidad. "Queremos una Málaga en la que la gente trabajadora y joven no tenga que perder el sueño por saber si va a ser expulsada de su barrio", ha señalado la candidata. 

El aplauso de los asistentes a una figura clásica de IU como Antonio Romero.

En el plano medioambiental, Morillas ha recalcado que "no hay un planeta B ni una Málaga B, los ríos no se alicatan y hace falta una ciudad sostenible, respirable y con zonas verdes".

Morillas viene por IU y el número dos de la candidatura en Málaga capital, Nico Sguiglia, por Podemos. "Se acabó el festín de los especuladores a partir del 28 de mayo porque hay que decidir entre una ciudad para el negocio de unos pocos o para todos", ha enfatizado Sguiglia, quien también ha subrayado que "De la Torre está obsesionado con la promoción turística, pero tiene que empezar a mirar y saldar la deuda interna con los barrios de la ciudad, barrios sucios, sin movilidad y con pistas deportivas hechas polvo". 

En la izquierda creen que si se moviliza el 45% de personas que no fueron a votar en las pasadas elecciones municipales de 2019 pueden tener una opción de provocar el cambio en la casona del Ayuntamiento. Habrá que ver qué ocurre el 28 de mayo.