El resultado obtenido por Ciudadanos en las elecciones andaluzas vino a consolidar la tendencia experimentada en el conjunto del país. Cada comicio autonómico ha estado acompañado de un duro golpe para los liberales, que solo han podido salvar los muebles en Castilla y León. Francisco Igea, hasta el momento, es la Galia que resiste al avance de los romanos populares. 

Ante esta reiteración de derrotas, la formación naranja decidió emprender un proceso de refundación y nombrar una gestora en Andalucía después de la dimisión de Juan Marín. Sin fichajes mediáticos ni planteamientos estridentes. Los de Arrimadas optaron por tirar de gente de la casa. En esta ocasión, Andrés Reche ha sido la persona designada para liderar este proyecto temporal.

Sevillano de nacimiento y malagueño de sentimiento, Reche ha venido ejerciendo las funciones de secretario de organización autonómico y jefe de distrito en Teatinos. Persona cercana al entorno de Noelia Losada, afronta ahora este reto confiado en recoger buenos frutos en las elecciones municipales.

No niega la dificultad a la que se enfrentan, es consciente de "los errores cometidos" en el pasado, pero también del camino que tienen por delante. Uno de los pilares para conseguir la remontada pasa por despertar el "activismo" de los afiliados y simpatizantes en redes: "Son los grandes embajadores de nuestras políticas".

Prevén que a lo largo de septiembre puedan tener cerradas las listas de los cabeza de cartel para los municipios de la provincia. Sobre este envite, afirma que, como mínimo, se van a presentar en el mismo número de localidades que en 2019, aunque asegura que serán más.

¿Qué diagnóstico hace del 19 J?

El 19 J marcó un hito, especialmente por los hechos que han venido aconteciendo hasta ahora. El partido ha tardado en reaccionar a la hora de regenerar un vacío de poder vigente durante estos dos meses. Eso ha derivado en la formación de la gestora, algo que yo venía pidiendo desde el día siguiente de las elecciones porque no quería que sucediera lo que ha sucedido. Tenemos las municipales a la vuelta de la esquina. 

No me congratulo porque sea el presidente, sino por el equipo que se ha montado. El municipalismo queda muy bien representado con los concejales y los que trabajamos cerca de los Ayuntamientos. Llevamos tres semanas, pero lo que prevalecen son las ganas de trabajar. Esto se contrapone con el bajón inicial que vivimos el 19 J. Tuve un momento muy sensible porque vi cómo se apagaba la imagen de Juan Marín, especialmente cuando se marchaba con los brazos puestos sobre sus hijos. Sabía que ahí algo iba a cambiar en Ciudadanos. Y de hecho, creo que quizá era hasta necesario darnos este varapalo para ofrecer lo que nunca debíamos haber perdido, la esencia del partido: los pies en la tierra, el municipalismo…

¿Qué motivos le han dado para su designación como presidente de la gestora?

Sinceramente, no lo sé. Supongo que el aval está en la gestión durante los dos años que llevo como secretario de organización, donde he trabajado montando un equipo e incorporándome a ese grupo de trabajo que se ha mantenido en este año. Esa labor y esa confianza han hecho que en Madrid se me abra la puerta, lo cual es un honor.

Andrés Reche. Amparo García

¿Se mantiene esa tesis de que la estructura de Cs no depende tanto de baronías sino de la dirección nacional?

Sí y no. Yo necesito que aquí haya cierta independencia y autonomía. Esto es posible gracias a la confianza en los integrantes del comité. Es cierto que antes había distintos contrapesos en el comité autonómico debido a los perfiles que lo formábamos, pero ahora no pasa. Las personas que han designado desde nacional son de la confianza de nacional. Es el momento de que los territorios tengan ese grado de autonomía dentro del partido, tomando decisiones de carácter unilateral, pero sin salirnos de la línea marcada.

Después de tocar poder en la Junta de Andalucía y sacar pecho de la gestión, se quedaron sin representación autonómica. ¿Cuál ha sido el problema? ¿La comunicación, la decadencia de la marca tras la repetición electoral de 2019, la vuelta al bipartidismo?

Creo que es un poco de todo; nosotros asumimos los errores que hemos cometido. Está claro que gestionando y haciendo política somos los mejores. Así queda evidenciado en Andalucía y en los municipios donde gobernamos. Somos buenos gestores y, si estamos en la oposición, fiscalizamos. 

En cuanto a la comunicación; estoy muy orgulloso de que Cs no haya gastado un duro de dinero público en marketing. Y es una de las claves que nos diferencia del Partido Popular. El PP hace un excesivo marketing, sobre todo con dinero público. A los hechos me remito con los medios a los que se ha podido subvencionar. 

¿Nos ha costado el cero? Vale, sí. Lo admitimos. Pero estoy orgulloso de la gestión. ¿Fallos de comunicación? Seguramente hayamos tenido. Ha habido una concatenación de errores, pero no hay ni un solo caso de corrupción. La gestión ha sido excelente, pero es una lástima que la ciudadanía vote a la persona, como pasó en Madrid o con Juanma Moreno en Andalucía. Nos ha perjudicado y eso que Juan Marín gozaba de buenos índices de popularidad y fue el ganador de los debates.  

Las torrijas.

El efecto torrijas, que hizo que incluso alguno dijera que nos podía dar un buen resultado. 

Pero de nada sirve sacar pecho de la gestión si no se puede traducir en algo continuado. ¿Qué papel ha jugado la marca en la debacle de las andaluzas?

Insisto; creo que es una concatenación de errores y circunstancias. La marca de Ciudadanos no pasa por su mejor momento, pero no por corrupción. Nos ha pillado un proceso de relevo de liderazgo con una pandemia. Inés Arrimadas no pudo reunirse con sus afiliados en un congreso; es víctima del momento que le ha tocado vivir en la política y dentro del partido. 

Sin embargo, yo no doy la marca por muerta. Sigo aquí trabajando porque esto tiene que dar frutos. Hacemos la política más cercana porque sale de los ciudadanos. Soy policía local y he dejado mi trabajo para dedicarme temporalmente a ello. Yo no pienso jubilarme de político. Pero no solo yo, mi concejala Noelia Losada trabajaba en la Universidad y es abogada; José María Leal, economista… Dejamos nuestro trabajo para vincularnos a este proyecto. ¿Que tenemos que conseguir que nuestro mensaje toque tierra? Sí, son los errores que tenemos que corregir. 

¿Le gustan las causas difíciles o imposibles?

Me encantan las causas difíciles. Si fuera imposible, no estaría aquí. Le dedicaría más tiempo a mi trabajo, a mi familia… Pero no es el caso.

Andrés Reche. Amparo García

¿Qué hoja de ruta se plantean?

Tuvimos en Sevilla una reunión del comité autonómico y definimos tres pilares relacionados con los problemas sobre los que no hemos podido trabajar y los objetivos. Uno de ellos es la comunicación; el otro, las municipales –ya trabajamos en la búsqueda de perfiles–; y el último, añadido recientemente, es la asamblea extraordinaria que nos encontraremos en diciembre y enero.

¿A dónde tiene que dirigir ese plan de comunicación?

Una de las cosas que más he admirado de este partido ha sido siempre el activismo digital de sus afiliados, grandes embajadores de las políticas de Ciudadanos. Tenemos que reactivarlo en Twitter, Facebook, Instagram, TikTok… Es una de las medidas que hemos hablado en la gestora y que se está trabajando desde la secretaría de comunicación. La idea es que marquen una estrategia para estimular y vender lo que estamos haciendo en los municipios. 

El partido se encuentra inmerso en un proceso de refundación ¿Cómo se traslada esa transformación al ámbito autonómico y municipal?

La refundación es un formato que me ilusiona. Entiendo que haya un sector crítico que no lo vea necesario, pero la afiliación ha respondido. 2000 personas se han puesto a las órdenes del partido para sentirse activos y participativos. En Madrid hicimos unos grupos de trabajo; unas jornadas muy divertidas e interesantes en las que se hablaba de todo sin tapujos. No puedo decir más porque firmamos una cláusulas de confidencialidad, pero hemos recibido unas encuestas con el feedback de los afiliados. La idea es que termine en una asamblea, así que creo que estamos siguiendo los pasos apropiados.

Ha habido una primera fase muy ideológica, al estilo de Guillermo Díaz. Pero ahora pasamos a una segunda fase; en cuatro o cinco llegaríamos a esa asamblea en el mes de diciembre. La participación de Díaz, María Muñoz y otros compañeros en ese G8 es una garantía de que esto va a salir bien. 

¿Es posible que Málaga goce de cierto protagonismo en este proceso? Guillermo Díaz como cabeza pensante de la refundación, usted como presidente de la gestora…

Sería injusto decir que la provincia de Málaga tiene cierta prevalencia dentro de Andalucía. Aquí en Málaga se ha trabajado muy bien el partido desde siempre. Llevo afiliado desde diciembre de 2014. Ciudadanos cala muy bien en la provincia y no genera rechazo entre la población. El hecho de que haya malagueños en cotas superiores es un orgullo para mí. También es una forma de presentar algo distinto; las políticas andaluzas siempre se centraban en Sevilla, así que, que Málaga tome el liderazgo, para mí es un orgullo.

Aunque también han tenido algunas ovejas negras.

No le pienso dedicar ni un minuto a esos personajes. 

No hay manera de que se mojen. 

Las diferencias que tuve con Juan Cassá se las dije personalmente a la cara porque es mi estilo. Aproveché un evento para soltar todo lo que tenía en mi interior. Pero no es mi estilo atacar por la espalda o redes sociales.

¿Tuvieron mala suerte con las cabezas de cartel en el Ayuntamiento y en Diputación?

Si yo fuese el secretario de organización que puso a la cabeza a estos candidatos, no estaría muy contento.

Vayamos a mayo de 2023. La presencia de Sumar de Yolanda Díaz está en el aire. Ciudadanos ya ha dicho que va a estar en las municipales.

Claro. Tenemos un patrimonio que ellos no tienen. Nosotros contamos con 400 concejales repartidos por Andalucía. 

¿Y en cuantos se plantean estar?

Mi objetivo es estar, como mínimo, en los mismos que nos presentamos en los anteriores comicios. Y esto que voy a decir puede parecer un acto de chulería, pero tenemos más municipios en los que nos están pidiendo que nos presentemos. Afiliados, candidatos de otros partidos que se quieren sumar a nuestro proyecto por la buena gestión realizada en Andalucía… Mi objetivo es presentarnos en los mismos, pero me estoy equivocando porque sé que nos vamos a presentar en más. 

Málaga, Torremolinos, Mijas…

No puedo dejar fuera Antequera, Marbella, Álora, Guaro donde tenemos una alcaldía…

En mayo va a volver a repetirse el escenario vivido hasta ahora: los votantes aprobarán, o no, la gestión de Ciudadanos. Con el background que se conoce, ¿temen que ocurra lo mismo que en otras autonomías? 

Pero en las municipales es distinto porque la marca personal tira muchísimo más. Tenemos el ejemplo de don Francisco de la Torre, que ha ocultado las siglas del PP en ocasiones anteriores. Nosotros no nos avergonzamos de la marca que venga, que espero que sea Ciudadanos y con el mismo color. Aquí quizá es difícil que, por el número de habitantes, se conozca el nombre de Noelia Losada. Pero en municipios como Antequera se sabe quién es Puche; o en Mijas, donde gobernamos con el PSOE. Soy muy positivo y tengo esperanzas en obtener un buen resultado en las municipales.

¿Cierran filas en torno al nombre de Losada para la capital?

Eso depende de lo que diga el partido.

¿Y qué dice el presidente de la gestora?

El presidente de la gestora no puede decir nada malo de Noelia, porque además de su jefa en el Ayuntamiento y en el distrito, es un encanto de persona. Una mujer muy lista y activa, pero no puedo dar nombres porque tenemos que aprobarlo. Los nombramientos saldrán de las secretarías delegadas provinciales. Y a mí, como secretario de organización andaluz y presidente de la gestora, nos llegarán esas propuestas. Losada es la persona ideal para que lidere Ciudadanos en Málaga. 

Andrés Reche, durante la entrevista. Amparo García

¿Qué plazos manejan?

Este mes de septiembre empezarán a salir. Es cuestión de días o semanas. Espero que para mediados de octubre tengamos el nombramiento de los candidatos de Andalucía. 

Decía que quiere que la marca siga siendo Ciudadanos y el color preferente, el naranja.

A mí me encanta el naranja y las siglas de Ciudadanos. Si el partido, a través de la asamblea, decide que hay que cambiar el nombre como han hecho otros partidos (Alianza Popular, Partido Popular, Populares…), no creo que haya ningún problema. Pero creo que Ciudadanos entró en política para cambiar cosas. Hay problemas más importantes que corregir. 

Quizá ese marketing al que se refería haya que aplicarlo también a las cuestiones estéticas.

No creo. Hemos abanderado causas que nos han puesto en el foco de atención, como la gestación subrogada, lucha contra los nacionalismos, el aborto, la legalización del cannabis. No tenemos tabúes a la hora de presentar esas medidas en cualquier parte del país. Seguimos siendo los únicos que defendemos esas medidas a la vez y en cualquier sitio. Incluso sentirnos orgullosos de sacar nuestra bandera (de forma física). Recuerdo el gesto de Inés Arrimadas de sacar la propia bandera de España en el Parlamento de Cataluña. A mí me dolía que fuera un hecho, un hito, cuando debería ser lo más normal. La ciudadanía tiene que saber que esos siguen siendo nuestros ideales y que los vendemos como conjunto liberal.

¿Inés Arrimadas tiene que estar al frente del proyecto que salga de la refundación?

El Partido Popular y el Partido Socialista soñarían con tener a una candidata como Inés en sus filas. Feijóo se levanta por las mañanas diciendo que ojalá Arrimadas formara parte de su partido. Yo entré en este partido en el liderazgo de Albert Rivera, a quién vi por televisión. Pero su relevo natural era Inés Arrimadas. 

¿Fue un líder Albert Rivera?

Sí.

¿E Inés Arrimadas?

Más. Albert Rivera tuvo una coyuntura política en la que Inés no se encuentra ahora. 

Las cotas bajas del PP.

Sí. Y la libertad de los medios de comunicación a la hora de decirlo. Es algo personal que creo. Eran muy críticos con el bipartidismo, pero ahora no lo encuentro. Se vende mucho más que haya un concejal de Ciudadanos que un caso de corrupción o que se hayan perdido 1000 y pico vacunas en Murcia. 

No sé si lo de Murcia es el mejor ejemplo, teniendo en cuenta lo que desencadenó.

Sí salió bien. La herencia de elegir como socio prioritario al PP fue un error en algunos municipios. El caso de Murcia es un ejemplo. Yo me siento muy tranquilo de que Ciudadanos no se encuentre en el gobierno de Murcia. Nos costó un caso de transfuguismo, crisis… Pero vivo muy tranquilo no estando ahí porque no me puedo fiar ni un pelo. En Andalucía entramos para cambiar las siglas, pero en Murcia, por un criterio que no sé por quién pudo venir, si Albert Rivera o Fran Hervías, les llegó la genial idea de marcar como socio prioritario el PP, pero nos salió mal.

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