Ada forma parte de una estadística que no deja de crecer en España. Con 23 años, trabajó como dependienta en unos grandes almacenes de Madrid, pero decidió marcharse en pocos meses.
"Yo trabajé como dependienta en unos grandes almacenes, pero me fui porque el ambiente laboral no era muy acogedor y porque mis jefes me obligaban a hacer cosas que no estaban contempladas en el contrato", relató en Herrera en COPE.
Su testimonio refleja una tendencia que atraviesa a toda la Generación Z: el 41% de los jóvenes entre 18 y 28 años deja su empleo antes de cumplir un año por decisión propia, según CEPyME5.
El comercio y los servicios son una de las puertas de entrada más habituales para los jóvenes madrileños. De hecho, un 12% de quienes acceden al mercado laboral en la capital lo hacen en este sector, , según datos del SEPE, normalmente en paralelo a los estudios.
Sin embargo, las condiciones están lejos de ser atractivas. El salario medio de un dependiente en Madrid se sitúa entre los 1.200 y los 1.400 euros brutos mensuales, una cifra muy por debajo del coste de vida en la ciudad.
Los factores
Esta brecha económica se suma a otros factores que explican la elevada rotación: largas jornadas, escasa flexibilidad horaria y un entorno laboral percibido como poco acogedor.
El fenómeno no es aislado. En términos nacionales, un 38% de jóvenes es despedido antes de completar un año en el puesto, mientras que un 35% planea cambiar de trabajo en los próximos doce meses, según el mismo estudio de CEPyME.
Solo un 11% de la Generación Z declara tener la intención de permanecer indefinidamente en la misma organización, indica CEPyME. La comparación con otras generaciones pone de relieve la magnitud del cambio: entre los ‘baby boomers’ solo un 11% dejaba el empleo en menos de un año, frente al 29% de los millennials y al 23% de la Generación X.
La especialista en Recursos Humanos Isabel Aranda explica que esta rotación responde, en parte, a un cambio de mentalidad: "La nueva generación tiene una relación con la autoridad, con el esfuerzo y con el trabajo diferente. No han estado entrenados en esas ideas en el contexto escolar".
Estrés y abandono
En paralelo, estudios recientes de ManpowerGroup muestran que el 61% de los jóvenes trabajadores sufre altos niveles de estrés laboral y que seis de cada diez contemplan dejar su empleo. Entre el 40 y el 50% asegura que se marcha si no encuentra flexibilidad.
A todo ello se suma un factor cultural amplificado por las redes sociales. La tendencia conocida como Quit-Tok ha acumulado más de 43 millones de visualizaciones en TikTok, con miles de usuarios que graban y comparten el momento en que comunican su renuncia.
El fenómeno comenzó en 2020 y hoy es una expresión más de una generación que prioriza los proyectos y la movilidad sobre la estabilidad en un único puesto de trabajo.
El profesor y experto laboral Fernando Trías de Bes lo resume en un contraste generacional. "Por muy mal que estuvieras, nadie se piraba antes de un año, porque eso era una mácula en el currículum. El mercado laboral juvenil está en un círculo vicioso".
En su opinión, la clave está en que los jóvenes no buscan "una silla", sino proyectos que les permitan crecer y experimentar. Una visión que encaja con la experiencia de Ada en Madrid, que decidió cerrar la puerta de su primer empleo antes de cumplir un año, como ya hace casi la mitad de su generación.
