La tragedia que ha conmocionado a Vallecas, la explosión en un bar, ha terminado de manera mortal para un hombre colombiano 52 años que se encontraba enterrado entre escombros en el sótano de 'Mis Tesoros'.
Los equipos de rescate ya habían abandonado los trabajos de búsqueda cuando la familia de la víctima acudió a la Policía Nacional porque no lo localizaban en toda la tarde y la angustia volvió a empezar.
Ha sido ya de madrugada cuando finalmente, ayudados por la unidad canina de la Policía, se ha encontrado el cadáver del único muerto por ahora de esta terrible explosión en un sótano, bajo más de un metro de arena y de escombro.
El interior del local donde se produjo la explosión, donde los bomberos han encontrado el cuerpo del fallecido.
Una psicóloga de Samur-Protección Civil ha atendido a la mujer del fallecido que llevaba horas buscándolo y que finalmente ha comprobado el peor de los destinos.
El fuerte estruendo que se vivió ayer en la calle Manuel Maroto ha cambiado el destino no sólo de la única víctima mortal, por ahora, sino también de 25 personas que han resultado heridas, varias de ellas graves.
Bomberos trabajando en la zona damnificada.
"Estábamos comiendo y hemos escuchado un ruido muy fuerte. He cogido a mi madre corriendo y nos hemos ido", relata Jesús, de 30 años a EL ESPAÑOL, momentos después de que el bar ubicado en el bajo de su edificio residencial saltase por los aires.
Sobre las 14:50 horas, una explosión en el bar peruano 'Mis Tesoros', situado en el número 3 de la calle Manuel Maroto del distrito madrileño de Puente de Vallecas, sacudió el bloque de viviendas. La principal hipótesis apunta a una "concentración de gas", como consecuencia de alguna fuga.
La detonación ha afectado al edificio en su totalidad. Incluso al local contiguo del restaurante, un establecimiento okupado desde hace, al menos, un año, por "varios jóvenes", según han confirmado a EL ESPAÑOL fuentes policiales de máxima solvencia y vecinos de la zona. En él se hallaron varias bombonas de gas butano.
Víctor, otro vecino del bloque de al lado, situado en la calle Blanca Luna, narra a este periódico cómo ha vivido la explosión del restaurante: "Fui corriendo a ver qué había sucedido. Había mucha gente que no podía andar. Había muchos cristales por el suelo".
Víctor, el vecino de 70 años que fue a socorrer a las víctimas.
Atendiendo a los últimos datos, 25 personas han resultado heridas, tres de ellas de gravedad. Entre los graves se encuentran dos varones de 40 años: uno de ellos sufre quemaduras muy graves y el otro un traumatismo craneoencefálico. Ninguno de ellos se encontraba en el bar en el momento de la explosión. Han sido enviados al Hospital 12 de Octubre y La Paz.
La vicealcaldesa de Madrid y delegada de Seguridad, Inmaculada Sanz, ha indicado que los vecinos de este edificio de nueve viviendas van a ser realojados "al menos durante algunos días", debido al daño en la estructura, que ha sufrido "importantes afecciones al forjado entre la planta cero y la primera".
Estructura afectada
Por su parte, el jefe del Cuerpo de Bomberos de Madrid, Carlos Marín, ha señalado que la estructura del bloque afectado está hecha de hormigón y acero y tilda de "gravemente afectada" unos 50-60 metros cuadrados de la estructura.
"El edificio, ahora mismo, está inestable (...) Por eso no podemos permitir el trabajo, el grado de inestabilidad lo valorarán los técnicos y, en función del grado de las actuaciones de consolidación estructural, se decidirá cuándo se puede trabajar en el edificio", ha explicado.
Fuentes de la Policía Municipal de Madrid sostuvieron a este diario que "una gran grieta" habría afectado a la estructura del edificio.
Al lugar de los hechos han acudido 13 dotaciones de Samur-Protección Civil y 18 bomberos del Ayuntamiento de Madrid, además de varias unidades del Servicio de Urgencia Médica (SUMMA 112) de la Comunidad de Madrid.
Los bomberos han realizado los trabajos de desescombro a mano tanto en el bar como en el local colindante, debido a la inestabilidad del edificio.
Durante las labores de desescombrado, los bomberos de Madrid han hecho cuatro rescates complejos. En los trabajos también ha participado la unidad canina de la Policía y varios drones para comprobar si había más personas sepultadas bajo los escombros.
