Publicada
Actualizada

En la noche de este lunes, sobre las 19:45 horas, la zona madrileña de Tres Cantos se vio envuelta en un atroz incendio que se extendió con gran velocidad debido a los fuertes vientos y que incluso se ha cobrado la vida de un hombre.

Los vecinos de Tres Cantos y de zonas aledañas tuvieron que evacuar rápidamente cuando comenzaron a propagarse las llamas. Juanma fue uno de los que tuvo que abandonar precipitadamente la zona.

El joven contó a EL ESPAÑOL la terrible experiencia vivida por él y su familia, que se encontraban en el tanatorio velando a su tío en el momento del suceso.

"Era un poco 'sálvese quien pueda'"

El joven madrileño relató que, junto a su familia, "íbamos a velar a mi tío durante toda la noche, este era nuestro propósito y así lo hemos hecho siempre".

No obstante, la situación comenzó a tornarse cuando "una hora de la tarde, más o menos a las 19:00 horas, comenzamos a ver una nube bastante oscura y digo yo 'hostia, esto es un fuego' y empiezan a surgir las noticias de que se está acercando a Tres Cantos".

En este contexto, Juanma y su familia continuaron velando a su tío; sin embargo, "siempre olía un poco a humo". Una vez más, salieron al exterior para revisar el estado del fuego y se encontraron con que "vimos un montón de gente donde están las tumbas que estaban señalando".

"Nos acercamos y vemos la magnitud del humo que era bastante grande ya", explicó. Así, alrededor de las 21:00 horas, fueron a cenar para luego regresar al tanatorio: "A la vuelta vemos el cielo con una estela roja, lenguas de fuego saliendo a la distancia y mucho humo bastante denso".

Incendio de Tres Cantos. Foto cedida

Frente a esta situación relativamente apocalíptica, agregó que comenzaron a acercarse animales que escapaban del fuego: "Había dos zorrillos que habían huido y a los que después les dimos agua como pudimos y se acercaban, eran muy confiados y debían estar aterrados".

"Estábamos muy angustiados porque no sabíamos qué iba a pasar con los familiares, con los muertos, no sabíamos si teníamos que evacuar..." continuó relatando el joven. Dicha incertidumbre llevó a que finalmente se acercasen a un guardia civil que les comunicó que "desalojen la zona".

En ese momento, declaró que "empezó a cundir el pánico con la gente que estaba ahí". Sobre las 00:00 horas, comentó que "tuvimos que salir todos corriendo", incluso comentó que "una madre salió con su hija con un ataque de pánico"

"En ese momento, la preocupación no era solamente que se salvasen los vivos, pero que al menos el recuerdo de las familias perdurase y que no pasase nada", contó a EL ESPAÑOL. También definió este evento como: "La última batalla, ya incluso post-mortem".

Imágenes del incendio de Tres Cantos. Foto cedida

"Era muy cruel el ambiente y muy hostil y ni siquiera nadie tenía la culpa, es un aspecto natural que ni siquiera se puede controlar", reflexionó el joven Juanma.

Así, llegaron las autoridades y comenzaron a desalojar la zona. "No hubo tampoco gente que organizase la salida del hospital, era un poco, 'sálvese quien pueda'".

"Cogimos los coches. Salimos y ya los coches amontonados, no había control, no había un orden y un poco caótico, la verdad, pero al final pudimos salir", comentó.

Al salir, pudieron ver "un dispositivo de más de 14 coches con sirenas y con las luces yendo a controlar el fuego", así como escuchar tres explosiones al irse.

Frente a esta terrible experiencia, añadió: "Mi prima, la afectada por el fallecimiento de su padre, se siente aún con la preocupación, mover a tu padre de un lado a otro genera mucha incertidumbre, no pudo dormir".

"Tras evacuar el tanatorio, el personal de emergencia reubicó a los difuntos a los distintos tanatorios de Parcesa (la empresa de servicios funerarios)", finalizó de relatar Juanma a EL ESPAÑOL.