Pfizer y su socio alemán BioNTech se están preparando para el juicio contra Moderna. Un proceso que tendrá lugar en abril de 2024 en el Tribunal Superior de Londres. Según informa Reuters, el caso ha llegado por primera vez al Alto Tribunal para una audiencia preliminar este mismo jueves.

El 'lío' farmacéutico comenzó el pasado mes de agosto, cuando Moderna presentó demandas contra Pfizer y BioNTech en Estados Unidos y Alemania por infringir patentes relacionadas con la tecnología del ARN mensajero, utilizada para el desarrollo de la vacuna contra la Covid-19.

El laboratorio estadounidense presentó estas demandas para "proteger" la innovadora plataforma de tecnología de ARNm. "Fuimos pioneros, invertimos miles de millones de dólares en su creación y la patentamos durante la década anterior a la pandemia de Covid-19", declaró el consejero delegado de Moderna, Stéphane Bancel.

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Según la farmacéutica, ambos competidores copiaron dos características clave de las tecnologías patentadas de Moderna. Además, defendió que cuando surgió la enfermedad "ni Pfizer ni BioNTech tenían el nivel de experiencia de Moderna en el desarrollo de vacunas de ARNm para enfermedades infecciosas" y, a sabiendas, siguieron el ejemplo de Moderna en el desarrollo de su propia vacuna.

El julio del año pasado, la farmacéutica alemana CureVac también presentó una demanda en el Tribunal Regional Alemán en Düsseldorf contra BioNTech por el mismo motivo: la infracción de una serie de patentes relacionadas con la tecnología ARN mensajero, utilizada para el desarrollo de la vacuna contra la Covid-19.

Al igual que Moderna, CureVac señalaba que había desarrollado a lo largo de los últimos 22 años una tecnología -que ha patentado- relacionada con el diseño y la fabricación del ARNm. "El rápido desarrollo de las vacunas contra la Covid ha sido un logro que se basa en décadas de investigación de CureVac", añadía.