Las empresas del sector sanitario privado no comprenden por qué el Ministerio de Sanidad promueve ahora un documento en el que se aborda un cambio sustancial del Sistema Nacional de Salud. 

Se trata de un borrador de trabajo en el que se propone "revertir" en el sistema sanitario 8.000 millones de las farmacéuticas, reforzar la gestión pública en todos los niveles, eliminar las desgravaciones a los seguros de salud y poner punto final a las mutualidades de funcionarios. 

Un documento adelantado por Invertia y que para el presidente del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), Juan Abarca, "es una irresponsabilidad" por el momento en el que se ha planteado (tras la pandemia) y cuando los rebrotes podrían hacer necesario un nuevo esfuerzo de todo el sistema de salud. "No es momento de proponer algo así", ha dicho Abarca. 

Un sólo sistema

El máximo responsable de la institución ha recordado que durante los momentos más duros del Covid-19 "no ha habido hospitales públicos y privados, ni pacientes públicos ni privados". Se trata, ha dicho, de la “primera vez en la que ambos sistemas han trabajado como un único sistema alrededor del paciente”.

Es por ello por lo que Abarca ha insistido en que es incomprensible que desde el Ministerio se plantee una reforma de gran calado del Sistema Nacional de Salud. Sobre todo porque, como ha dicho, "intenta aprovechar el dolor de la gente" para cambiar las reglas de juego en las que se mueve el sector sanitario y avanzar en su "estatalización". 

Apuesta ideológica

Para el presidente del IDIS no se puede hacer "una apuesta ideológica", lo que hay que lograr es que “el sistema funcione lo mejor posible”. Sobre todo porque de lo que se trata ahora es de que se "invierta más en el sistema público" y que el sistema privado sea "un complemento" en todo aquello a lo que el sistema estatal no pueda llegar. 

"Hay iniciativas que intentan quitar importancia a la aportación que hacemos", ha querido subrayar Abarca en su intervención, al poner de relieve la inversión que en los últimos años la sanidad privada ha venido llevando a cabo para potenciar la calidad de sus servicios. 

Ahora bien, según ha insistido Abarca, si el Ministerio sigue adelante con sus planes, quizá sería el momento "de plantear otros modelos alternativos" al que existe en este momento y preguntar a la gente qué es lo que quiere. 

En este sentido, ha valorado que existe "un intento permanente por controlar todo lo que tiene que ver con la libertad de los usuarios y del sector" por parte de ciertos sectores de las Administraciones públicas. 

Unas palabras que ha pronunciado en la presentación de la Encuesta de percepción sobre la aportación de la sanidad privada. En ella se refleja que el 68% de los españoles creen que el sistema público debería apoyarse en el sistema privado para reducir las listas de espera.