Apertura con ligeras pérdidas en Wall Street. Los principales índices de la Bolsa de Nueva York arrancaban el día en negativo a pesar de las fuertes subidas que registran las aerolíneas tras la presentación de resultados de Delta Air Lines.
El Dow Jones perdía un 0,1%, hasta los 44.415,29 puntos; el S&P 500 restaba un 0,06%, hasta los 6.252,49 puntos, y el Nasdaq Composite, un 0,03%, hasta los 20.604,24 puntos.
Las mayores subidas del Dow Jones eran las de American Express (+1,24%), McDonald’s (+1,02%) y Caterpillar (+0,68%). Por el contrario, las mayores pérdidas eran las de UnitedHealth (-1,59%), IBM (-1,4%) y Salesforce (-1,28%).
Así abre Wall Street
Fuera del índice destacaban las subidas de las aerolíneas. Delta Air Lines se disparaba un 10,75% tras actualizar al alza su pronóstico de ganancias para todo el año.
En concreto, la compañía espera que los beneficios ajustados por acción en 2025 se sitúen entre 5,25 y 6,25 dólares, cifra superior al consenso del mercado.
Los inversores han interpretado esta revisión como "una señal de estabilización de la demanda y mejoras en las perspectivas para la industria aérea", subrayan los analistas de XTB.
Además, los resultados del segundo trimestre, que Delta Air Lines ha presentado este jueves, han superado las expectativas de los analistas. La dirección de la empresa ha destacado la fortaleza del segmento premium y la estabilidad de la demanda corporativa en Estados Unidos.
United Airlines se disparaba un 9,7%, mientras que American Airlines avanzaba un 9%.
Las cuentas de Delta Air Lines han sido el pistoletazo de salida de la temporada de presentación de resultados en Wall Street. Los inversores esperaban que los grandes bancos estadounidenses publiquen sus cuentas la próxima semana.
“Habrá que estar muy atentos a lo que dicen todas ellas sobre la fortaleza de la demanda y, sobre todo, con relación al impacto que en costos y precios están teniendo ya los nuevos aranceles impuestos por la nueva administración estadounidense”, señalan los analistas de Link Securities.
Los inversores también seguían pendientes de cualquier novedad en el frente comercial, después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, haya confirmado la imposición de un arancel del 50% a la importación de cobre. El gravamen se hará efectivo el 1 de agosto.
EEUU ha impuesto aranceles contra Filipinas, Argelia, Irak, Libia, Sri Lanka, Brunéi y Moldavia que también entrarán en vigor el 1 de agosto.
Asimismo, Trump ha amenazado a Brasil con la aplicación de aranceles del 50%, argumentando que este alto gravamen se debe, no solo al déficit comercial, sino al juicio contra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro por intento de golpe de Estado.
Los principales índices de Wall Street se frenaban tras hacer cerrado la sesión del viernes en positivo. El Nasdaq Composite, además, alcanzó nuevos máximos históricos gracias al impulso de Nvidia.
El gigante tecnológico se convirtió en la primera empresa cotizada cuya capitalización ha superado los 4 billones de dólares.
El parqué neoyorquino se vio beneficiado por la publicación de las actas de la reunión que la Reserva Federal (Fed) mantuvo en junio, en la que la institución decidió mantener los tipos de interés en el rango de entre el 4,25% y el 4,5%.
Los documentos mostraron que varios de los miembros del banco central son partidarios de bajar los tipos de interés antes de que termine el ejercicio.
Sin embargo, sólo una minoría del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Fed estaría dispuesta a votar a favor de un recorte de tipos en la reunión que mantendrán el 30 de julio.
Las actas también mostraron que los banqueros centrales creen que los aranceles impuestos por Trump "podrían" tener un "efecto persistente" sobre la inflación.
Por el contrario, "unos pocos" apostaron por que se traducirían en un aumento puntual de los precios sin afectación a largo plazo.
Si bien el mercado ha descartado que la Fed baje los tipos en julio, las posibilidades de que el recorte se produzca en septiembre han crecido hasta el 67%, según los datos de LSEG.
Por ahora el mercado laboral estadounidense sigue dando muestras de fortaleza.
Las peticiones de subsidio por desempleo en Estados Unidos alcanzaron la semana pasada un total de 227.000 solicitudes, lo que supone una bajada de 5.000 personas respecto a la cifra anterior.
