El Tesoro Público ha ejecutado su tercera emisión sindicada de 2025. En esta ocasión, ha emitido 13.000 millones de euros de un bono sindicado a 10 años. La demanda recibida ha sido de más de 120.000 millones de euros, similar a la de anteriores subastas.
La nueva referencia a 10 años se ha emitido con un cupón del 3,2% y una rentabilidad del 3,235%.
La demanda, 9,23 veces superior a la cantidad emitida, ha permitido al Tesoro reducir dos puntos básicos el coste de la operación sobre el diferencial anunciado inicialmente. Asimismo, se ha quedado siete puntos básicos sobre la rentabilidad del actual benchmark a 10 años.
Gracias a ello, explican fuentes del Ministerio de Economía, se ha mejorado “de forma notable el ahorro financiero”. Además, consideran que “la elevada demanda refleja el fuerte interés de los inversores en la deuda pública española”.
Las emisiones sindicadas, que están fuera del calendario oficial de subastas del Tesoro, son operaciones en las que un grupo de bancos coloca directamente la deuda entre los inversores.
En esta ocasión han participado como entidades colocadoras BBVA, Banco Santander, Société Générale, Barclays, JP Morgan y Morgan Stanley.
Fue el pasado 22 de febrero cuando el Tesoro efectuó una emisión con unas características prácticamente iguales a la que ha emprendido este miércoles.
En esa ocasión colocó 15.000 millones de euros de un bono a 10 años, con un cupón también del 3,15% y vencimiento en abril de 2035, después de que los inversores demandaran títulos por importe de 139.000 millones.
En febrero también realizó otra emisión sindicada, pero de obligaciones a quince años, en la que vendió 7.000 millones de euros, después de que la demanda se aproximara a 95.000 millones. Esos títulos tenían un cupón del 3,45% y vencían en enero de 2041.
Tipos de inversores
En este caso, los inversores no residentes han alcanzado una participación del 87,4%. Destacan el Reino Unido e Irlanda, con un 28,7%, Francia e Italia, con un 12,2%, Alemania, Austria y Suiza, con un 7,5% y los países escandinavos, con un 6,2%.
El resto de los inversores europeos han representado el 16,7% de la asignación. Por su parte, Asia ha representado un 6,8%, Oriente Medio un 5,3% y Estados Unidos y Canadá un 3,6%.
Atendiendo al tipo de inversor, la mayor participación ha correspondido a las gestoras de fondos, con un 33%, seguidas de los bancos centrales e instituciones oficiales, con un 26,9%, las tesorerías bancarias, con un 19,1%, y las aseguradoras y fondos de pensiones, con un 11,5%.
El resto de las empresas de servicios bancarios han participado con un 3,7%, los fondos apalancados con un 3%, y otros inversores han representado un 2,8%.
59,6% ya emitido
Con la transacción de este miércoles, el Tesoro ha completado el 59,6% de su programa de financiación, con una emisión de 105.212 millones de euros hasta la fecha.
La vida media de la deuda del Estado en circulación alcanza los 7,9 años y el coste medio de la cartera de valores del Tesoro se sitúa en el 2,3%.
"El Tesoro continúa con la ejecución de su programa de financiación de 2025 con un sólido acceso a los mercados financieros, especialmente relevante en el actual contexto de incertidumbre internacional", subrayan desde el ministerio de Economía.
Consideran que esta cuestión, "junto con la alta participación de inversores internacionales de elevada calidad evidencian la fortaleza de la deuda pública española y la confianza de los inversores en la economía española", añaden.