Joe Biden, presidente de Estados Unidos, ha decidido nominar de nuevo a Jerome Powell al frente de la Fed, en el que sería su segundo mandado consecutivo como responsable del órgano. Esto supone que será el presidente de la Reserva federal hasta febrero de 2026.

Biden también ha decidido nominar como vicepresidenta a Lael Brainard, la candidata con la que contaba el ala más izquierdista de su partido para suceder a Powell.

"No podemos volver a donde estábamos antes de la pandemia, tenemos que reconstruir mejor nuestra economía. Confío en que el presidente Powell y la doctora Brainard se centren en mantener la inflación baja, los precios estables y en conseguir el pleno empleo para que nuestra economía sea más fuerte que nunca", ha dicho Biden, tras dar a conocer las nominaciones.

Reacción de los mercados

La noticia no ha variado en nada la euforia en la que vive Wall Street y que se ha traducido en unos nuevos máximos históricos del S&P500 y el Nasdaq.

El mercado de renta fija apenas se ha movido pero sí ha reaccionado a la baja el oro, cayendo casi un 2%.

En general, la solución de Biden es atractiva para los mercados porque supone una continuidad (las sorpresas no suelen gustar) y, además, es una señal de política bipartidista pues de todos es conocido que Powell es republicano y Brainard demócrata.

De esta manera, las operaciones financieras realizadas por Powell en 2020 y por miembros de su junta no han hecho mella en la decisión de Biden de mantenerle en su cargo. 

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