Aena invertirá cerca de 13.000 millones de euros en cinco años (2027-2031) para garantizar que los aeropuertos que conforman su red en España puedan atender el crecimiento previsto de pasajeros durante al menos las próximas dos décadas.
Una cantidad que la compañía prevé financiar con un aumento de su nivel de endeudamiento, que actualmente es muy bajo, pero también con subidas de tarifas que, según aseguran fuentes de Aena, se llevarán a cabo de forma que no afecten a la "competitividad" de los aeropuertos españoles.
El gestor aeroportuario anunció este jueves una inversión histórica en sus aeropuertos de 12.888 millones de euros para el periodo comprendido entre 2027-2031. Una cifra de la que alrededor de la mitad irá destinada a lo que se denominan "grandes actuaciones", como las ampliaciones de Barajas o El Prat.
Según explican fuentes de Aena, el objetivo de este plan es proporcionar a los aeropuertos españoles la capacidad, la tecnología y la seguridad necesarias para atender el crecimiento previsto de la demanda y evitar su saturación.
Para ello, la compañía deberá elevar sus inversiones a niveles no vistos desde principios de este siglo, lo que conllevará la búsqueda de nueva financiación, que se obtendrá tanto a través de subidas de tarifas como de un aumento de su nivel de endeudamiento.
Tarifas competitivas
Las fuentes aclaran que el modelo de financiación será lo suficientemente eficiente para que haya una tarifa que "retribuya adecuadamente" estas nuevas inversiones, pero que al mismo tiempo siga siendo "competitiva".
"Van a ser unas tarifas que no van a penalizar de ninguna forma el crecimiento del transporte aéreo en España", aseguran las fuentes, que subrayan además en los últimos diez años ha descendido el ingreso máximo anual por pasajero, desde los 11,11 euros de 2015 a los 11,03 previstos para 2026.
Para el próximo año, Aena ya ha aprobado una subida del 6,5% de las tasas aéreas, lo que equivale a unos 68 céntimos más por pasajero. Las fuentes remarcan que de esta cantidad, 45 céntimos son atrasos de años anteriores y sólo 23 céntimos son realmente de subida.
No obstante, descartan por el momento dar cifras exactas de la cuantía futura de las tarifas, dado que el DORA III está todavía en fase de elaboración y hasta octubre no comenzará el periodo de consultas con las compañías aéreas.
En este contexto, en Aena descartan una extensión del régimen transitorio aplicado entre los años 2015, cuando entró capital privado en la empresa, y 2025, en el que se establecía la congelación de las tarifas.
A este respecto, recuerdan que en ese régimen, además de establecerse la política de tarifas, también se limitaban las inversiones a un máximo de 450 millones de euros. Por ello, es "materialmente imposible" ampliar la congelación de tarifas sin limitar la inversión y "poner en riesgo" el crecimiento de los aeropuertos.
Asimismo, aclaran que estas inversiones anunciadas no se van a pagar todas en el próximo quinquenio a través de las tarifas aeroportuarias, porque en este caso se debería aplicar una subida muy fuerte a las mismas y eso es algo inviable.
En consecuencia, esas inversiones se financiarán inicialmente en gran parte con deuda y se irán amortizando a lo largo de los próximos 20 o 25 años una vez que ya estén en funcionamiento las nuevas infraestructuras y se obtengan nuevos ingresos.
Deuda
Sobre el endeudamiento de Aena, las fuentes remarcan que actualmente es "muy bajo" e inferior de lo que suele ser habitual en una empresa de infraestructuras intensiva en capital como es un gestor aeroportuario.
Desde la compañía, consideran que este hecho es una consecuencia directa de no haber necesitado llevar a cabo un volumen de inversión alto en periodos regulatorios anteriores.
Por este motivo, la compañía ha decidido recurrir a un incremento de su deuda para afrontar el nuevo ciclo inversor que empieza previsiblemente en 2027. Pese ello, las fuentes aseguran que los ratios de deuda serán los que suelen tener un gestor aeroportuario en pleno ciclo inversor, con lo que busca dar tranquilidad a los mercados.
