Julio Sanz y la Federación Profesional del Taxi en Madrid sorprendieron a todos. En 2013, la organización solicitó a Madrid 5.000 licencias de vehículos con conductor privado (VTC) y no las consiguió. El objetivo que defendían era la retirada de todos esos permisos del mercado para tratar de hacer la guerra a compañías como Uber o Cabify. Ocho meses después deciden desistir. Explican que la razón es el temor a perder la batalla judicial, aunque desde la patronal de coches con chófer alertan: detrás hay un problema legal con su asociación y la presión del resto del colectivo.

Fue en 2013 cuando la Federación Profesional del Taxi en Madrid presentó la petición de 5.000 licencias de VTC en la Comunidad, justo antes de que se aprobara la ley estatal que las limitaba. Su objetivo era claro: ‘reventar’ el sector de la VTC. “Es un movimiento estratégico para proteger al sector del taxi; si alguien había solicitado alguna y se le conceden, al enterarse de que va a tener que compartirla con 5.000 compañeros más igual se lo piensa. No le va a salir tan rentable”, aseguró el directivo.

Los números hablan por sí solos. El colectivo solicitó 5.000 nuevas licencias de VTC. Sólo en Madrid, actualmente existen casi 1.900 permisos activos de este tipo. Es decir, se pretendía multiplicar casi por tres las cifras.

Madrid denegó la petición pero la Federación presentó un recurso. Esta última decisión se conoció en mayo de 2016 por el resto de organizaciones del taxi, que mostraron su indignación. Desde Fedetaxi, el colectivo mayoritario del sector, acusaron a Sanz y la organización de tratar de especular con las licencias de VTC.

Ahora, unos meses después de ese recurso, la organización ha decidido desistir de su petición. En el escrito en el que lo formaliza, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, alegan que frenan el proceso ante la previsible negativa en los tribunales. Y mencionan algunas sentencias en Asturias o Navarra en contra para peticiones similares.

Sin embargo, la presión del resto del sector del taxi (y de las empresas de VTC) había sido muy fuerte. Fedetaxi y la Asociación Gremial del Taxi de Madrid se habían personado en el proceso judicial tras el recurso contencioso-administrativo de Sanz. Han aplaudido la decisión, con la que “caminan unidos con el resto de organizaciones ante los retos que se presentan al servicio del taxi, abandonando toda acción unilateral que perjudica a todos”.

¿Problemas legales en la asociación?

Unauto se apunta también el mérito de esta paralización del proceso para obtener 5.000 licencias. Asegura que aportó las pruebas para demostrar que la sociedad solicitante (Teletaxi Madrid Servicios) “no estaba legalmente constituida”.

“Las razones [que menciona la Federación Profesional] nada tienen que ver con la realidad; no es más que un intento de negar las evidencias e intentar justificar los graves errores cometidos”, apunta Unauto. Y lo justifica: aparte de las sentencias desfavorables de Navarra y Asturias, hay más de 40 pronunciamientos favorables dictados por los Tribunales de Madrid y otras muchas más dictadas por los tribunales de Andalucía, Valencia, Baleares, Murcia, Galicia, País Vasco o Aragón.

Un vacío legal muy fructífero

Durante los últimos meses, el sector del taxi ha mostrado su preocupación por el incremento importante del número de licencias de VTC otorgadas en las grandes ciudades. ¿La razón? Un vacío legal que ha generado la Ley Ómnibus, para la liberalización de servicios. La consecuencia: particulares y empresas han solicitado estos permisos y tras la negativa de las comunidades han acudido a los tribunales y, en su mayoría, han logrado la victoria.

En diciembre de 2015 el Gobierno de Rajoy finiquitó este vacío legal con el Reglamento de Ordenación de los Transportes Terrestres (ROTT), en el que se 'resucitaba' la proporción de 1 licencia de VTC frente a 30 de taxis, reclamada por estos últimos. Sin embargo, las victorias judiciales se han ido sucediendo. Según cifras de la propia Fedetaxi, sólo en el último mes se han otorgado judicialmente 269 licencias en Madrid.

Según los cálculos del abogado de Unauto, José Andrés Diez, en los próximos años el mercado de las VTC en Madrid estará conformado por unas 6.000 licencias (hoy hay, según Fomento, casi 2.000). En Cataluña, de acuerdo a sus estimaciones, se podrán alcanzar las 5.000 (en Barcelona hay hoy casi 800).