Las personas que trabajan por cuenta propia, es decir, los autónomos, son probablemente el sector de la población activa que más preocupado se encuentra por la situación de la economía y por sus fluctuaciones. Su pelea con la Agencia Tributaria es eterna por la cantidad de impuestos que tienen que pagar por los ingresos que reciben cada año de sus negocios. 

Ahora, el nuevo sistema de cotizaciones obliga a muchos autónomos a realizar un cambio en sus previsiones para no tener problemas con Hacienda. Este sistema relacionado con los ingresos reales del año, que se aprobó el 27 de julio en el Boletín Oficial del Estado (BOE) mediante el Decreto-ley 13/2022, obliga a las personas que quieran darse de alta como autónomo a conocer cuál es la forma de pagar sus cuotas de la Seguridad Social en profundidad. 

Este nuevo sistema de cotización por ingresos reales fue aprobado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y entrará en funcionamiento durante los próximos tres años. Su principal novedad es que ahora miles de autónomos deberán presentar la declaración, algo que antes solo tenían que hacer si no superaban una cantidad determinada de ingresos. 

¿Qué impuesto tendrán que pagar los autónomos a partir de ahora?

El actual sistema de cotización cuenta con quince tramos que determinan las bases de cotización y las cuotas en función de los rendimientos netos del autónomo. Sin embargo, con el nuevo sistema muchos autónomos tendrán que pagar el impuesto sobre el IRPF en la declaración de la renta. Una cuestión que la mayoría de ellos antes no tenían que abordar. 

Esta nueva situación afectará principalmente a todos aquellos que se hayan dado de alta durante este 2023 y es que tendrán que incluir este impuesto sin importar cuáles hayan sido sus ingresos. De momento, la Agencia Tributaria ya ha cifrado el número de trabajadores que se verán afectados por esta cuestión en unos 200.000

[Esta es la fecha que cambiará la vida a los autónomos al no tener que declarar el IVA]

La nueva tributación variará en función de sus ingresos reales, es decir, dependiendo de la facturación a lo largo de este año y de los beneficios que han tenido durante este período. Para evitar fraudes, la Seguridad Social comprobará la veracidad de los datos aportados para así testar que la declaración se ha hecho correctamente en forma y tiempo. Tras estos cambios, a partir de ahora muchos autónomos en lugar de pagar una cuota fija a la Seguridad Social deberán abonar una cantidad en función de los ingresos reales declarados.

Si por algo son conocidos los autónomos en España es por tener un sistema de cotización diferente al resto de trabajadores. Además, desde hace muchos años, siempre ha existido la reclamación de una modificación de este sistema por parte del colectivo al considerar que la cantidad de dinero que les queda cuando llegan a la edad de jubilación es muy pequeña. Ahora, el nuevo sistema incluye una serie de cambios en varios puntos importantes:

  • Cuotas



  • Tramos de cotización



  • Cálculo de rendimientos



  • Cambio de tramos



  • Protección ante el cese de la actividad

Tras estos nuevos cambios, la Seguridad Social indica que "los rendimientos netos se calcularán deduciendo de los ingresos todos los gastos producidos en ejercicio de la actividad y necesarios para la obtención de ingresos del autónomo. Sobre esa cantidad, se aplica adicionalmente una deducción por gastos genéricos del 7% (3% para los autónomos societarios)".