Economía

Oliu critica la "creciente impresión de inseguridad jurídica" en la banca

28 marzo, 2019 18:54

El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, ha reclamado este jueves "unos marcos jurídicos y políticos estables" que permitan a la banca desarrollar su actividad con seguridad y eficacia, ante la "creciente impresión de inseguridad jurídica" que vive el sector.

En la junta de accionistas que se celebra en Alicante, donde el banco trasladó su sede social hace un año y medio, Oliu ha dicho que el sector bancario ha logrado avanzar en el último año en la reducción de la morosidad y el fortalecimiento del capital, aunque la rentabilidad continúa siendo su principal reto.

Ha asegurado que las entidades se han visto afectadas por un marco regulatorio más complejo y menos predecible, que impone mayores requisitos de capital, y una "creciente impresión de inseguridad jurídica derivada de ciertas resoluciones judiciales que han repercutido muy negativamente" en la cotización, los resultados de las entidades y su reputación.

Hay ejemplos "muy significativos", ha dicho Oliu, como el debate provocado sobre la posible retroactividad del impuesto de actos jurídicos documentados o las incertidumbres por la posible revisión del índice IRPH en los préstamos hipotecarios por el Tribunal de Justicia de la UE.

"Este índice, utilizado en multitud de operaciones, se trata de un índice oficial, publicado por el Banco de España, cuya utilización principalmente por las cajas de ahorros estaba amparada en normas administrativas", ha reivindicado Oliu. El presidente del Sabadell ha apuntado que "los análisis interesados" sobre una posible sentencia contraria a la banca causan en las entidades "daños económicos y de reputación de difícil reparación" y también perjudican al propio marco de seguridad jurídica español.

Por ello, ha exigido que las entidades financieras puedan desarrollar su actividad con unos marcos jurídicos y políticos estables, más allá de que los bancos, ha añadido, trabajen de acuerdo con los "mejores estándares de conducta, con transparencia y los más exigentes niveles éticos".

A este respecto, ha reconocido que los bancos tienen "un reto reputacional" y que la imagen social de las entidades "debe ser renovada": "Y ello sólo se puede hacer con buenas prácticas ancladas en la rectitud ética y en la transparencia de todas nuestras actuaciones", ha subrayado.

En su intervención, Oliu no ha pasado por alto los problemas derivados de la migración tecnológica de TSB, su filial británica, que han supuesto unos costes extraordinarios de 460 millones de euros.

Una vez solventadas estas incidencias, ha indicado que TSB ha recuperado su actividad normal e inicia una nueva etapa en 2019 en la que prevé "retomar la dinámica comercial y avanzar en la mejora de los niveles de eficiencia".

Oliu ha recordado que, debido al impacto en los resultados del grupo por la migración de TSB, tanto él como el consejero delegado, Jaume Guardiola, han renunciado de forma voluntaria a sus bonus y han cobrado únicamente sus sueldos fijos.

De cara al futuro, Banco Sabadell quiere poner el foco en la mejora de la eficiencia y la rentabilidad, centrando su actividad en los tres mercados en los que opera, como son España, México y Reino Unido, muy pendiente en este último caso de la evolución del Brexit.