Tras el durísimo impacto que está provocando la Covid en España y Europa, los fondos europeos para la reconstrucción “abren una oportunidad única para que España se suba al carro de las economías más competitivas y disruptoras”, asegura a D+I Andrés Pedreño, presidente de AlicanTEC y miembro del Comité de Expertos del Gobierno para la Elaboración del Libro Blanco sobre la Inteligencia Artificial y el Big Data entre 2017 y 2018.

“Debemos ser exigentes y evitar destinar inversiones a fines que no tengan la capacidad tractora para potenciar y hacer realmente competitiva y líder nuestra economía”, incide Pedreño. “Estas ayudas no pueden acabar en ‘empresas zombies’ disfrazadas de digitalización o de acciones medioambientales”.

En su opinión, los fondos europeos deberían priorizar y ponderar una triple vertiente: en primer lugar, transformar España como “startup nationpara fortalecer los ecosistemas digitales, su integración y complementariedad, a través del fomento de la escalabilidad de las startups y las empresas digitales existentes.

En este sentido, este experto subraya que aquellas empresas que han superado rondas de inversión “deberían ser objeto de un gran número de incentivos para su aceleración”. Para ello, es fundamental “combinar instrumentos que van desde la compra pública innovadora de las Administraciones Públicas a la movilidad del talento”, así como identificar startups y ayudarles a generar productos mínimamente viables.

La segunda vertiente que se debe afrontar mediante estos fondos sería la conversión de España en un país disruptivo. “Deberíamos poner foco en las tecnologías más disruptivas, especialmente la inteligencia artificial (IA), como tecnología de propósito general, que afecta horizontal y verticalmente a todo”, puntualiza este experto en IA.

Deberíamos poner foco en las tecnologías más disruptivas, especialmente la inteligencia artificial (IA), como tecnología de propósito general, que afecta horizontal y verticalmente a todo

Para lograrlo, Pedreño indica que a través de estos fondos europeos “habría que ampliar muchísimo la exigua apuesta que, recientemente, ha hecho pública el Gobierno español (600 millones), que es poco más de la mitad de lo que tiene previsto invertir una sola universidad estadounidense”. La clave está en incentivar la IA aplicada a nuestros sectores y empresas más representativas.

Y esto nos lleva a la tercera vertiente de esta estrategia: “la transformación digital de los sectores clave en la economía española”. Es decir, “poner foco en los sectores con más capacidad de crecimiento y de futuro”: desde la inteligencia de los destinos turísticos hasta la banca del futuro, pasando por el transporte, la logística, los servicios sanitarios, la agroindustria, el medio ambiente, entre otros.

Ecosistemas especializados y eficientes

Más allá de la transformación de estos sectores clave, Pedreño apunta otra pieza clave: “El propio desarrollo de ecosistemas y startup digitales especializadas en tecnologías disruptivas en Europa y España”, con el objetivo de conseguir “potentes ecosistemas eficientes que se complementen y no compitan entre sí dentro de nuestro territorio”. 

En este sentido, hace hincapié en que, en la actualidad, en diferentes comunidades autónomas se repiten propuestas e iniciativas, “sin integración, ni suficiente complementariedad”, por lo que “acaban debilitándose entre sí”.

“Necesitamos que nuestras startups escalen, ganen tamaño, sean relevantes en España, en Europa y en el mundo”, subraya el presidente de AlicanTEC. Las startups deben centrarse en las tecnologías más disruptivas y con mayor capacidad de recorrido: inteligencia artificial, internet de las cosas (IoT), blockchain, computación cuántica, ciberseguridad… En definitiva, apostilla, “sin ecosistemas especializados y eficientes nuestras startups difícilmente crecerán”.

Para favorecer estos objetivos, las administraciones “deben hacer planes y políticas más ambiciosas” en torno a muchos temas: políticas educativas STEM, atracción y retención de talento, regulación eficiente e incentivadora, I+D privada, transferencia de tecnología en tecnologías de propósito general…

“España y Europa no están liderando la economía digital en el mundo, cada vez son más dependientes y vulnerables y hay que preguntarse por qué”, concluye Andrés Pedreño. “España no debería esperar a que, en sus sectores más emblemáticos y empresas críticas, las soluciones vengan de fuera u otros países las adopten mucho antes que nosotros”.

Noticias relacionadas