Mike Shebat llegó a Miami por exigencias del guion. Trabajaba en Uber, en uno de los trabajos más divertidos y creativos que nunca pudo imaginar. Su equipo ideaba potenciales usos de la aplicación, con especial énfasis en Uber Eats, su servicio de restauración a domicilio.

Tras este periodo de experimentación decidió dejar Uber pero no la ciudad. Miami se convirtió en su hogar: “Es una ciudad vibrante, internacional y un gran lugar para empezar una compañía. Te acoge muy bien. Los negocios, y la gente en general, se prestan a probar nuevos conceptos. Se apoya al emprendedor”. Con este caldo de cultivo, decidió lanzar Traba: una plataforma que conecta trabajadores industriales con puestos de trabajo con turnos disponibles.

El nombre, Traba, es una clara referencia a los términos en español 'trabajo' y 'empleo' que sirve de declaración de intenciones. “Hemos hecho una app completamente funcional en español. En Florida hay un gran número de centros de distribución, de procesado de alimentos, almacenes. Por lo tanto, nos permite probar y escalar un modelo que queremos implantar en todo el país”, dice para explicar que con su startup quiere reinventar cómo los empleados de estos almacenes, muchas veces temporeros, van a poder tener continuidad, beneficios, turnos claros, etc.

El futuro del trabajo es flexible

Shebat considera que el futuro del trabajo será flexible para ambas partes, tanto empleados como empleadores, y que se adaptará a diferentes momentos vitales. “Puede que estudien de noche o que tengan que cuidar de los hijos durante el día. El trabajo no tiene que impedir tener una vida, sino acomodarse a la misma”, sostiene.

El fundador menciona al propio proceso de selección como punto a mejorar: “Un mismo empleado puede tener diferentes habilidades y desarrollar dos trabajos. También puede adquirir conocimiento y formarse. El futuro del trabajo va a tener mucha más transparencia. Ahora mismo todo pasa por un proceso de entrevista y un posterior compromiso sin saber muy bien cómo se va a desarrollar la labor”. En Traba se pagará por adelantado por el turno y, cuestión importante, se podrá ver qué opinión tienen otros empleados que hicieron la misma labor antes.

Shebat considera que las compañías también se van a beneficiar de esta nueva era: “Van a tener unos costes fijos reducidos, una mejor adaptación a las necesidades de temporada… Y, en realidad, las entrevistas no son la mejor manera de conocer a alguien, son largas, pero no reflejan lo duro o no que alguien trabaja o si es puntual”.

Durante las últimas semanas Miami pasa una de sus pruebas más importantes. En diciembre comenzó la ola de empleo tecnológico. Se mantuvo durante la primavera. Normalmente, con la llegada del verano, muchos de sus habitantes deciden huir del clima tropical. No ha sido así. No sólo se ha celebrado que el número de empleos siga creciendo y la pandemia quede atrás, sino que son varias las compañías que han decidido dar el paso y abrir en Miami.

Francis Suárez, alcalde de la ciudad y protagonista de su promoción, subraya que quiere convertir Miami en la capital del capital. Una clara alusión a su capacidad para atraer inversión. El miércoles le dio la bienvenida a Traba a través de un Cafecito Talk, una conversación acogedora en su despacho que se emite a través de YouTube.

El poder del español

Traba llega a Miami con la promesa de reclutar un buen número de empleados en ingeniería, diseño, ventas, operaciones y marketing para poder afinar y refinar su plataforma. Quieren estar listos para lo que denomina la vuelta al trabajo de América.

En el plan están no solo apoyar a estos empleados calificados, sino también a los de nivel más bajo que van a usar la aplicación para hacer turnos más rápidos, claros y con paga en el momento en que se unen al puesto trabajo. “En Traba no le quitamos nada al empleado. Los costes recaen en el empleador”, recalca.

En Florida, donde se habla tanto español o más que inglés, muchos de los usuarios de Traba, empleados y empleadores, desarrollan su vida laboral saltando entre ambos idiomas. También son muchos los que sólo hablan español. Entra dentro de los planes ser especialmente inclusivos e incluir contenido y especial atención al idioma de más crecimiento en Estados Unidos.

Traba nace con una inversión de 3,5 millones de dólares como capital semilla. Cuenta con apoyos importantes, como Founders Fund, el fondo liderar por Keith Rabois, uno de los impulsores iniciales de Miami Tech, y General Catalyst; así como inversores particulares de prestigio como Erik Torenberg y Julian Weisser, los fundadores de On Deck, un programa de formación que busca crear la fuerza laboral digital del futuro. Así como Austen Allred, de Lambda School, o dos recientes emprendedores que se han mudado a Miami, Matteo Franceschetti y Jack Altman.

Noticias relacionadas