La UE, con la ayuda de la información aportada por las fiscalías antidroga de  los países europeos, entre ellos España, estudia la entrada al continente del captagon, la droga conocida como la "poción mágica del yihadismo". Así consta en un informe publicado esta misma semana por el Centro Europeo de Monitorización de Drogas y Adicción a las Drogas (European Monitoring Centre for Drugs and Drug Addiction).

El captagon, por las sustancias de las que está compuesta, actúa directamente en el sistema nervioso de quien la consume. "Lleva a los terroristas a estar más convencidos de su fin, a actuar con determinación, violencia e ira", explica una fuente de la Fiscalía Antidroga a EL ESPAÑOL. Les ayuda, en resumidas cuentas, a actuar como zombies, sin remordimientos, sin pararse a pensar en las consecuencias de sus actos. 

Restos de drogas que podrían ser coincidentes con el captagon fueron encontrados en los cuerpos de los terroristas del ataque a la sala Bataclan de París, donde murieron 89 personas y se cometieron atroces actos violentos contra las víctimas. También parece que fue consumida por Seiffidine Rezgui, el atacante que en 2015 mató a 39 personas con un kalashnikov en Susa (Túnez).

Según datos aportados por las autoridades policiales internacionales, dicha droga se elabora (o corta) en Bulgaria, se distribuye en Turquía y se consume en Oriente Medio. De ahí que el mercado del captagon en los países del Este de Europa próximos a los Balcanes sea motivo de preocupación.

Desde 2014, el mayor número de incautaciones de esta droga se han producido en Israel, Jordania y los Emiratos Árabes. Y, aunque para los investigadores es difícil de demostrar con datos, una de las pruebas de la relación del captagon con el terrorismo islamista es que la guerra de Siria tuvo un impacto en su producción.

Tabletas de captagon incautadas por la policía israelí. EL ESPAÑOL

Extrema ira y agresividad

"Los test toxicológicos revelan la presencia de una droga que deja exhausto a quien la consume, le vuelve agresivo, con extrema ira y le conduce a estar entregado. También mejora su función física y mental". Esta es la descripción forense que se incluía en el sumario del juzgado que investigó el atentado de Túnez en el que un solo hombre mató con un kalashnikov a 39 personas. 

Los principales componentes del captagon son las anfetaminas y las meta-anfetaminas, aunque en una de las últimas incautaciones realizadas en Arabia Saudí, en las tabletas también se encontraron otros componentes como cafeína, efedrina (medicina tradicional china que suele utilizarse para aumentar el estado de alerta y disminuir el apetito), cloroquina (utilizado originariamente para prevenir la malaria), teofilina (también estimulante del sistema nervioso y broncodilatadora), quinina y paracetamol (con propiedades analgésicas).

Sello incautado en uno de los laboratorios ilegales desmantelados. EL ESPAÑOL

Fue medicina para el déficit de atención

Sin embargo, el origen del captagon fue muy distinto al que le dan los yihadistas. Era una medicina psicoactiva producida en los años 60 por la compañía germana Degussa Pharma Gruppe. Se prescribía como tratamiento para el déficit de atención que sufren personas hiperactivas y para la narcolepsia, como un estimulante del sistema nervioso central. 

Entre 1970 y 1990, el captagon original también estuvo relacionado con el dopaje en el deporte: ciclistas, futbolistas y jugadores de rugby europeos lo utilizaron como estimulante. Su uso se prohibió cuando las agencias de medicación europea retiraron la fenetilina, un componente del captagon que une anfetamina y cafeína. De ahí que los traficantes de Europa y Oriente Medio -los dos principales mercados donde se distribuía- utilizaran los excedentes de la fenetilina para mezclarla con otras sustancias y convertirla en una droga ilegal. 

El captagon droga tiene exactamente la misma forma, color e incluso logo que tuvo el medicamento. Unas pastillas redondas, blancas y con dos medias lunas. Las últimas incautaciones de esta droga relacionada directamente con el terrorismo yihadista se produjeron en Líbano.