Jordi Sánchez, diputado electo de Junts per Catalunya en prisión desde el pasado 16 de octubre, ya ha presentado un escrito a la Sala Segunda del Tribunal Supremo solicitando su puesta en libertad, como adelantó este jueves su abogado Jordi Pina.

El líder de ANC defiende en dicho documento que la manifestación convocada por él mismo y los representantes de otras asociaciones a las puertas de la Consejería de Economía ente el 20 y el 21 de septiembre mientras una comitiva judicial hacía un registro dentro del edificio, fue pacífica.

Sánchez atribuye "los posiles excesos" durante dicha manifestacción a "una minoría de los presentes" y defiende que "ya ha sido condenado" por esos hechos. Rechaza cualquier conducta violenta en dicha concentración e incluso va un paso más allá: dice que "se esforzó para que no se produjera el menor atisbo de violencia o intimidación". Se intenta desligar así de la necesidad de alzamiento público tumultuario para que se de el delito de sedición por el que está investigado e ingresó en prisión.

En este sentido, el abogado de Sánchez expone que "es injusto que toda una labor reivindicativa y pacífica durante años de la entidad que presidía mi mandante pueda quedar empañada por una concreta actuación de unos cuantos exaltados –no representativos del resto de manifestantes-, que permita tildar de 'violenta' la actuación del Sr. Sànchez quien, por el contrario, consta en las actuaciones que puso todo su empeño para que la jornada no dejara de tener exclusivamente un carácter reivindicativo.

En dicho escrito remitido a la Sala Penal del Supremo, Sánchez insiste en que no hay riesgo de reiteración delictiva y que su situación ha cambiado porque ahora es diputado electo a raíz del resultado de las elecciones catalanas.

Compara el 20S con manifestaciones contra los desahucios

El defensor de Puigdemont argumenta que la imputación de Sánchez responde a las "connotaciones políticas del caso" y pone como ejemplo la multitud de manifestaciones celebradas a lo largo del año como las convocadas para protestar contra los desahucios. Dice que en éstas también  "se ha impedido la comisión judicial" y jamás se ha imputado a sus responsables por sedición. 

Este jueves, durante su comparecencia en el Tribunal Supremo, Jordi Sánchez renunció a la violencia y acató la Constitución. Igual que el exconsejero de Interior y también candidato de JxCat, Joaquim Forn, avanzó que renunciará a continuar en su partido si éste sigue la vía unilateral.

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