Las claves
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Antonio Olivera, jefe de Gabinete del expresidente canario Ángel Víctor Torres, negoció con la empresa Soluciones de Gestión la compra de mascarillas durante la pandemia.
Un informe de la UCO revela que Olivera solicitó al administrador de Soluciones de Gestión preparar una oferta de dos millones de euros, tras negociar esa cantidad con Koldo García.
El mensaje de Olivera al empresario Íñigo Rotaeche deja constancia de la intervención directa del entorno de Torres en la operación de compra de mascarillas en 2020.
Antonio Olivera, jefe de Gabinete del ministro Ángel Víctor Torres (hasta su dimisión) y director del Servicio Canario de Salud durante la pandemia, negoció con la trama de la empresa Soluciones de Gestión para la compra de mascarillas.
Según los mensajes recogidos por la UCO en un nuevo informe del caso Koldo, Olivera mandó un mensaje al administrador de Soluciones de Gestión, Iñigo Rotaeche, el 21 de abril del año 2020 en el que pidió al empresario preparar una oferta de dos millones de mascarillas.
"Íñigo, prepárame una oferta con 2 millones, ¿vale? Negocié con Koldo esa cantidad", se lee en el mensaje enviado por el exdirector de Salud canario.
Una operación por la que se contrató a Soluciones de Gestión, matriz de la trama, para la compra de 2.750.000 mascarillas a cuenta de 6.875.000 euros.
Los mensajes hallados por la UCO figuran en un informe de 350 páginas al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL.
En él, los investigadores reflejan que el primer contacto del Gobierno de Canarias con la empresa de Koldo y Víctor Aldama fue a raíz de este mensaje de Olivera a Rotaeche.
La UCO evidencia que fue Aldama quien pasó el contacto del dirigente canario al administrador tras la cancelación de varios vuelos con mascarillas.
Según las conversaciones intervenidas, desde ese momento, la Administración canaria comienza a establecer contactos recurrentes con la empresa a propósito de las compras de más material sanitario.
"'¡Buenas tardes Koldo! Hablado con Íñigo, sólo me queda cerrar la cantidad del envío. ¿Es posible que nos quedemos en esta ocasión 2 millones de unidades o la cantidad máxima que quepa en el vuelo? ¿Te parece bien?", se lee en un mensaje anterior de Antonio Olivera a Koldo.
Para los investigadores, esto demuestra que la empresa Soluciones de Gestión ya estaría suministrando mascarillas a Canarias "incluso antes de llevarse a cabo las adjudicaciones del contrato", algo que sucedió el 22 de abril. Un día después de esta conversación.
A partir de ese momento, los mensajes posteriores entre Antonio Olivera e Íñigo Rotaeche se centran en ultimar los detalles del envío, ordenar facturas y otros trámites.
La UCO recopila en el informe un correo de ese mismo día enviado por Antonio Olivera a la directora general de Recursos Económicos del Servicio Canario de Salud, Ana María Pérez, donde le presenta una oferta de 5 millones de mascarillas elaborada por Rotaeche y le indica "aceptar la oferta para poder hacer esta operación relativamente rápido".
La Guardia Civil recoge, además, varios correos entre la directora y una trabajadora, María Salomé Ballesteros, en los que esta última desconfía de la oferta por no tener pruebas la calidad de las mascarillas y afirma que se han "comprado mascarillas más baratas".
"¿Estamos seguros? ¿Hay dinero suficiente? Son 12 millones de euros...", son algunas de las dudas que expresa la trabajadora.
El mismo 22 de abril por la tarde, Ana María Pérez escribe a María Salomé Ballesteros informándole de que el pedido a Soluciones de Gestión ya se había formalizado.
Finalmente, Iñigo Rotaeche envía a Victor Aldama la primera Factura Proforma que se lleva a cabo por el contrato a un precio de 2,50 cada mascarilla y un montante total de 6.875.000 euros.