El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha encendido la polémica política al pronunciar unas duras declaraciones sobre el presidente Sánchez en las que cuestiona su legitimidad moral para abordar temas sensibles como la prostitución y la ética pública.
"No es una crítica, es una crónica", ha afirmado Feijóo con contundencia, en referencia a los supuestos locales de encuentros sexuales de la familia política de Sánchez de los que se habría beneficiado económicamente.
El líder de la oposición ha insistido en que sus afirmaciones no constituyen un ataque personal, sino una descripción de hechos conocidos públicamente y publicados por los medios de comunicación desde hace más de una década.
"Yo no he hecho ninguna crítica sobre los negocios de la familia del presidente del Gobierno. He hecho una crónica sobre esos negocios que ustedes (los periodistas) han publicado desde hace más de diez años", ha señalado.
Feijóo ha subrayado que no está dispuesto a aceptar "lecciones de moralidad desde la inmoralidad". Y ha criticado que Sánchez "no puede ser un adalid y decir que va a abolir la prostitución, cuando participó en el abominable negocio de la prostitución."
Con unas declaraciones aún más incisivas que las pronunciadas en el último Pleno del Congreso, el presidente del PP ha defendido que Sánchez, "lo mínimo que tiene que hacer es tener la humildad de reconocer que durante una época de su vida esa prostitución le vino bien en el ámbito personal y patrimonial."
Postura desde la que encuentra una incongruencia grave entre el discurso público del presidente del Gobierno y su pasado.
Lejos de rebajar el tono, Feijóo ha dejado claro que continuará señalando lo que considera una doble moral del Gobierno. "La verdad no es faltar al respeto, es simplemente la verdad", ha sostenido.
El presidente del PP ha respondido a las declaraciones del ministro Óscar López en las que acusa al político gallego de "ser el político más sucio de la historia reciente de España". Feijóo ha dicho: "Yo no voy a insultar al ministro porque sus propias declaraciones son un insulto y describen perfectamente su personalidad."
Financiación catalana
Desde Barcelona, ha criticado el inminente acuerdo entre el PSOE y el PSC para impulsar una "financiación singular" para Cataluña. Según el líder de la oposición, esta propuesta representa "un atajo político" que rompe la igualdad entre comunidades autónomas y desprecia el marco institucional establecido.
"El órgano para pactar la financiación es el Consejo de Política Fiscal y Financiera, no la reunión entre dos miembros de ese consejo", ha afirmado en referencia a la negociación bilateral entre la ministra de Hacienda y el president de la Generalitat.
En ese sentido, ha subrayado que "ni la ministra tiene capacidad para transferir el 100% del tributo, ni el president tiene capacidad para recaudar ese tributo". Para el dirigente popular, los acuerdos bilaterales en materia fiscal no sólo son ilegítimos, sino que vulneran el principio de solidaridad entre territorios.
Sin embargo, Feijóo ha reconocido que "Cataluña necesita más financiación" y ha asegurado que si él es presidente "la tendrá, pero en una sala donde todos nos pongamos de acuerdo".
En un ataque a las bases del PSOE, Feijóo ha pedido que el Gobierno lleve negociación con el resto de comunidades la financiación singular en Cataluña: "Quiero ver qué opinan el presidente de Castilla-La Mancha o el de Asturias", ha apuntado, cuestionando la falta de transparencia y debate plural en torno a la iniciativa.
El presidente del PP ha recordado que el sistema de financiación actualmente en vigor fue pactado "por el tripartito catalán con el presidente Zapatero", y que cualquier reforma debe hacerse desde el marco legal común.