Javier Ortega Smith, diputado de Vox, ha defendido en la noche del jueves a los manifestantes contra la amnistía concentrados en las inmediaciones de la sede del PSOE en Madrid, a los que ha definido como "gente de bien" que ama España.

Ortega, que ha participado en la noche del jueves en la decimocuarta concentración en Ferraz, que ha terminado con incidentes, cargas policiales, 10 detenidos y cinco heridos, ha dicho a los periodistas que los concentrados "no son una colección de fascistas, ni de ultras, son españoles que aman a España".

Inmediatamente después de las primeras cargas de los antidisturbios y rodeado de manifestantes, ha criticado que "los prófugos, los golpistas y los delincuentes sean a los que este Gobierno amnistía, indulta y les da nuestro dinero para que les voten".

Frente a esos, los manifestantes son, para el dirigente de Vox, "gente honrada, españoles de bien", no como "los que están en La Moncloa y sus socios", que son "los que tendrían que estar en prisión".

Minutos antes, en su cuenta de la red social X, había asegurado que su formación no acepta actitudes violentas de manifestantes, ni abuso de la autoridad por parte de ningún agente.

"No aceptamos ni actitudes violentas de ningún manifestante, ni abuso de la autoridad por parte de ningún agente. La Ley nos obliga a todos. El derecho a manifestarse pacíficamente en defensa de España y la libertad, no es contrario al respeto al orden público" refiere el también portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid.

En su mensaje, Ortega Smith incluía un vídeo en el que se ve cómo se identifica con su carné de diputado durante la protesta de la noche del jueves en Ferraz a agentes de policía, a quienes dice que van como observadores y que llevan cámaras para grabar si hay excesos por parte de policía o de manifestantes.

Alrededor de 4.000 personas, según datos provisionales de la Delegación del Gobierno en Madrid, participan en la decimocuarta concentración junto a la sede federal del PSOE en la madrileña calle de Ferraz, en la jornada en la que Pedro Sánchez ha sido reelegido presidente del Gobierno.

La presencia de manifestantes radicales, muchos de ellos embozados y haciendo el saludo fascista, ha sido más notable que en noches previas.