El Senado ha aprobado este miércoles y de manera definitiva la reforma de la Ley del sólo sí es sí. El PSOE, que presentó la modificación de manera unilateral, ha vuelto a contar en la Cámara Alta con el apoyo del PP, al igual que sucedió la semana pasada en el Congreso. Así, la ley estrella de la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha sido sustituida por las correcciones técnicas que planteó la de Justicia, Pilar Llop

La modificación ha sido aprobada con 231 votos a favor, 19 en contra y 4 abstenciones. Ningún miembro del Gobierno ha acudido a la sesión -a diferencia de cuando se aprobó por primera vez, que sí acudió Irene Montero- y la bancada del PP ha celebrado la aprobación poniéndose en pie y aplaudiendo a Alberto Núñez Feijóo, presente en el hemiciclo. 

Ahora sólo falta que la reforma, que nació con el objetivo de frenar la reducción de penas a condenados por delitos sexuales, se publique en el BOE. Con su aprobación, se hace efectiva la ruptura entre los dos socios del Gobierno, que han protagonizado duros reproches cruzados durante toda la tramitación de la ley. A pesar de ello, no hay riesgo de ruptura. 

Tanto la oposición que encarna el PP como los aliados habituales del PSOE han acusado en el debate del Senado a los socialistas de abrirse a esta modificación "por fines electoralistas". "Sólo cuando las encuestas de Tezanos [presidente del CIS] les dicen que la realidad les castiga por no hacer nada, entonces copian al PP", ha dicho la senadora popular Patricia Rodríguez.

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"Hoy lo hemos conseguido, enhorabuena presidente", ha añadido, refiriéndose a Feijóo. La senadora ha dicho que, con la reforma del sí es sí "comienza la derogación del sanchismo", en referencia a lo que le dijo el líder de la oposición a Pedro Sánchez este martes en su último cara a cara antes de las elecciones del 28-M.

"Hoy demostramos que somos el único partido que está a la altura de lo que necesita España. Somos un partido útil para los españoles", ha añadido.

En los supuestos intereses del PSOE de reformar el sí es sí al albur de las encuestas ha coincidido la senadora de EH Bildu Idurre Bideguren. "Si la política no funcionara por electoralismo, no estaríamos hoy aquí", ha asegurado, llegando a calificar la reforma de "despropósito electoralista".

Bildu intentó en el Congreso, junto a ERC, presentar unas enmiendas que sirvieran de terreno común para aunar las posturas del PSOE y de Unidas Podemos. El éxito fue nulo, y la senadora ha asegurado que "la derecha está encantada" porque "ha logrado que [los socialistas] reculen y que se rompa la respuesta unitaria progresista en cuanto a las agresiones sexuales".

El PSOE en el Congreso, gracias al apoyo del PP, introdujo una modificación para crear un subtipo agravado dentro del delito de agresión sexual para hacer que las penas sean más altas en los casos de violencia e intimidación. Para Unidas Podemos, que no tiene representación en el Senado, esto implica volver al Código Penal anterior, al de La Manada.

Tras aprobarse la reforma la semana pasada en el Congreso, este martes se aprobó en la Comisión de Justicia del Senado y este miércoles ha sido ratificada en la Cámara Alta. La norma ha visto la luz verde en sólo cuatro días laborables desde que partió de la Cámara Alta, algo que ha sido criticado por muchos grupos, que aseguran que no es forma de tramitar leyes.

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Desde el PSOE se han defendido de los ataques a dos bandas. "No es una derogación de la ley, la totalidad de la ley se mantiene igual" al margen de los retoques puntuales, ha asegurado la senadora María Elena Diego. "El margen de interpretación [de los jueces] es tan amplio", ha asegurado, "que estamos debatiendo que hay que reducir el marco de interpretación".

Su compañero José María Oleaga ha recordado, en referencia a Unidas Podemos que, para que la ley saliera adelante, el Partido Socialista retiró "todas las enmiendas de la prostitución, porque ustedes amenazaban con votar en contra".

Aunque Irene Montero no ha acudido este miércoles al Senado, sí que se ha pronunciado desde la sesión de control al Gobierno que ha tenido lugar en el Congreso de los Diputados. La titular de Igualdad ha dicho que ahora hay que aplicar la ley "mucho más", ya que se ha "conseguido un retroceso en los derechos de las mujeres".