Pablo Iglesias cree que Isabel Díaz Ayuso no sólo acabará con la carrera política de Pablo Casado, sino también con la de Alberto Núñez Feijóo, y que terminará siendo la presidenta del PP. El exvicepresidente del Gobierno, que sabe de primera mano lo que es que Díaz Ayuso frustre las aspiraciones de un oponente, asegura que la derecha camina hacia el trumpismo y que esa corriente tiene un aliado efectivo en los medios de comunicación.
"Pensar que el modelo Feijóo puede funcionar para restar espacio político a Vox y para conseguir un liderazgo del PP en ese bloque de la derecha creo que es ingenuo, y que en el momento en el que empiece ese liderazgo, la derecha mediática con sede en Madrid va a decir 'este señor aburrido y tan de centro y no sé qué no nos sirve para comer terreno con respecto a los trumpistas genuinos que son los de Vox'", sostuvo Iglesias este lunes en la Cadena SER.
Para el exlíder de Podemos, Vox es una fuerza que "desprecia abiertamente la democracia y la verdad" y que "representa un tipo de inconsciente de la derecha que vimos en la calle Génova el otro día, que parecía el asalto al Capitolio, con gente con disfraces". Y esa gente, en defensa de Díaz Ayuso este domingo, se impondrá, "sospecha" Iglesias: "Yo sospecho que esto en lo que va a terminar es que al final va a mandar Ayuso porque va a decidir la derecha mediática".
Opina Iglesias que "hay una obsesión de una cierta izquierda pensando que es posible una derecha democrática en España que salve las instituciones". A su juicio, "es una fantasía". "En el momento en el que el trumpismo ha vampirizado al conjunto de la derecha -explicó- ese sueño de la izquierda de que existe una derecha democrática y antifascista solamente está en la cabeza de algunos bienintencionados".
Otro vaticinio de Iglesias es que "esta derecha ya no va a ser como la hemos conocido en los últimos 30 años". "Si alguien piensa -añadió- que una persona como Ayuso que es capaz de salir reforzada de un caso de corrupción evidente puede traer a este país algo diferente a una involución democrática, quien no se dé cuenta de eso está siendo bastante ingenuo".
Margallo elogia a Feijóo
Iglesias, como cada lunes, compartía mesa de debate en la SER con la exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo y el exministro José Manuel García-Margallo. La de este último es una opinión relevante, aún en activo además en calidad de eurodiputado y tras haberse medido en primarias con el propio Casado en 2018, recuerda, "con un resultado manifiestamente mejorable" por su parte.
Recordó García-Margallo que en ese proceso interno para elegir al presidente del PP manifestó que si Núñez Feijóo se postulaba, retiraría su candidatura para adherirse a la del presidente de la Xunta de Galicia. "Y mi opinión sobre Alberto Núñez Feijóo no ha cambiado", recalcó el exministro, elevándole como un dirigente "acreditado" que encadena mayorías absolutas y "entiende muy bien lo que es la España plural y diversa".
García-Margallo considera además a Núñez Feijóo "un hombre de claramente de centro y dialogante" al que los críticos pueden tachar de "aburrido". "Pero estos días -bromeó el exministro- estamos deseando un poco de aburrimiento en el PP".
Su valoración sobre los últimos acontecimientos en su partido es cuando menos diferente: "Aunque parezca sorprendente, la palabra es normalidad -comenzó García-Margallo-. Estamos en una crisis y se está gestionando de acuerdo con lo que dicen nuestros estatutos. Se ha convocado una junta que es el único órgano que puede convocar un congreso, sea ordinario o extraordinario".
Calvo culpa a Casado
"Estoy convencido -continuó el exministro- de que la mayoría va a optar por un congreso, no se puede seguir sosteniendo esta situación de inestabilidad que se está traduciendo en una sangría permenente de votos y en una amenaza que no es menor para España, que es que el PP sea sustituido en el liderazgo de la oposición por Vox".
Carmen Calvo quiso desmentir la imagen que pueda tenerse de los socialistas ante esta grave situación en el principal partido de la oposición: "No estoy celebrando esto. Estoy preocupada y con mucho pesar sobre este asunto que creo que no beneficia a nadie. Los únicos que tienen que estar encantados de la vida son la ultraderecha y el fascismo de nuestro país", afirmó.
Pero, para Calvo, todo lo ocurrido "se veía venir". Lo explicó así: "Casado era un líder improvisado del enfrentamiento de las otras dos candidatas -en referencia a Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal-, que no era el líder que correspondía a un partido como el PP por lo que representa para nuestro país y que había errado el tiro en dos direcciones muy importantes: no saber que su gran tarea era frenar a Vox y aceptar que mediante moción de censura es legal, legítimo y constitucional un Gobierno".
Calvo concluyó planteando una duda: "¿Todo el mundo tiene claro que Feijóo se quiere presentar? Porque con Ayuso lo tenemos claro porque dice que Madrid es España. ¿Feijóo ha dicho exactamente que está en la casilla de salida?"