Como cualquier otro verano, el expresidente de la Generalitat prófugo de la justicia, Carles Puigdemont, ha celebrado su tradicional reunión de amigos en torno a una paella. Sin embargo, hace tiempo que el escenario cambió: desde que huyó de España, la cita no se celebra en Cadaqués (Gerona), sino en Waterloo (Bélgica), donde el político reside en una mansión.

A la quedada independentista han acudido lo que Pilar Rahola ha venido a llamar los "apóstoles", que esperan su ración de arroz "en tierras de Tintín". La periodista catalanista ha sido la encargada de compartir a través de su perfil de Instagram las fotografías de la comida.

Entre los invitados han destacado el consejero de Políticas Digitales de la Generalitat, Jordi Puigneró; el empresario Xevi Matamala, principal mecenas de la escapada de Puigdemont a Bélgica; el rapero exiliado Valtònyc, el diputado y abogado Jaume Alonso-Cuevillas y el exconsejero de Cultura, también fugado, Lluis Puig.

No eran los únicos: también se pasaron por allí el exconseller Toni Comín, el médico Bonaventura Clotet, la empresaria Gemma Recoder yel diputado nacional de Bildu Jon Inarritu.

Allí, y siempre según las publicaciones de Rahola en la mencionada red social, los temas que se trataron fueron la "complicidad, amistad, lucha, libertad y Cataluña".

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