Esteban González Pons, número dos de la lista del PP a las elecciones europeas, ha protagonizado el mitin que daban este sábado los populares de la mano de la candidata a alcaldesa de la capital valenciana, María José Catalá; la presidenta del PP en la región, Isabel Bonig, y el presidente nacional, Pablo Casado.

Su discurso, elaborado no en defensa sino en reivindicación de las siglas del PP y de por qué es "el auténtico partido que representa la Unión Europea" ha arrancado los aplausos de los asistentes, acusando a "los imitadores del PP" de no ser el PP, de ser "nacionalistas" tan perniciosos como los otros -en referencia a Vox- o inexpertos -por Ciudadanos-.

González Pons comenzó y terminó su alocución hablando en persona "ahora que nadie nos oye, aquí en privado", a Casado. "Debo decirte dos cosas, gracias por tu confianza, no te voy a fallar; y debes saber que hace dos domingos no se perdió nada, empezó todo". Según el político valenciano, "la presidencia del Gobierno no se gana sólo en las urnas, se merece en la carrera política", y auguró "una conquista épica" de la Moncloa para Casado: "El domingo pasado empezaste a merecerte ser el próximo presidente del Gobierno de España".

Y en el cierre del discurso, viunculó el nombre de su presidente nacional con los de los presidentes del Gobiernbo de centro derecha: "Este es el partido de Adolfo Suárez, de Leopoldo Calvo Sotelo, de José María Aznar, de Mariano Rajoy... y de Pablo Casado", concluyó. "De Suárez a Casado, somos un partido de centro derecha, el que daría la vida porque España sea una y también porque siga siendo plural... gracias por este partido", dijo mirando al líder del PP.

"Los nacionalismos son todos iguales"

González Pons articuló su mitin en una frase: "Fijaos que digo primero centro y luego derecha", explicó. "Primero centro reformista y después derecha moderada". Porque de ahí surgieron sus críticas a "los imitadores" que, "desde muy cerca, pegaditos a nosotros", hay partidos que "están en contra de la UE". Para el popular valenciano, y sin nombrarlos, votar a Vox "es votar en contra de lo que la UE significa" porque los de Abascal "quieren volver a levantar fronteras, segregar a las personas por el color de su piel o origen geográfico".

"Sólo debemos recordar quiénes somos y los servicios que hemos dado a España", dijo señalando a Casado, "todo lo demás está bien".

Los nacionalismos, dijo González Pons, "cambian inteligencia por intransigencia y todos son iguales, da igual que sean catalanistas, vasquistas, alemanes, franceses, del brexit... o nacionalistas españoles". Y es que, en la jornada siguiente de celebrar el Día de Europa, el numero dos de la lista europea del PP recordó que el origen de la UE vino tras la II Guerra Mundial, "como herramienta de paz".

"Los nacionalismos son el primer peldaño de la escalera del autoritarismo, del racismo y de la guerra en Europa", dijo entre aplausos. "Nos han costado millones y millones de muertos, es el error que los europeos y no lo podemos volver a cometer".

"Puigdemont es un cobardica de marca mayor"

Tras despachar a Vox, González Pons hizo mofa de unas declaraciones del expresidente huido de la Generalitat, Carles Puigdemont. "Ayer se alegró ayer de que por suerte no vaya a haber un González Pons que pare el procés". Se rio el político valenciano y recordó que no fue él, sino "los 16 diputados del PP, los de Ciudadanos, los de UPyD, los socialistas... y todos los demócratas de toda la Unión los que no quisieron que la peste del nacionalismo volviera a arraigar en la UE".

Además, acusó a Puigdemont de equivocarse, no sólo porque él seguirá en el Parlamento Europeo, sino porque quien no lo estará será el expresident. "El día que venga a recoger el acta, lo detendrá la Guardia Civil".

En esas palabras, Puigdemont calificó a González Pons de "soldado españolista", y el político valenciano se lo tomó con orgullo. "Además, pretender usar eso como insulto es sorprendente viniendo de un cobardica de marca mayor".

"Votar alegremente o con alegría"

También sin citarlos, González Pons se refirió a Ciudadanos cuando defendió que en las elecciones europeas del 26-M "se puede votar alegremente o con alegría". Porque en el Paralamento Europeo, que él conoce de los últimos cinco años en los que ha sido la mano derecha del alemán Manfred Weber al frente de los populares europeos, "se deciden cosas que aquí no se hablan pero que nos cambian la vida". Y citó el cambio climático, las migraciones masivas, la robotización del mercado laboral, la globalización de la economía, "la integración de los perdedores de la revolución digital", la despoblación del campo, la seguridad alimentaria, el respeto a los animales....

"Los retos de la UE son los retos de nuestras vidas, de los próximos 25 años", dijo, "y por eso no podemos votar de manera descuidada, no son un juego". Así, defendió la necesidad de "partidos maduros, influyentes, partidos reconocidos y reconocibles" con el objetivo de que "sean como nuestros abogados". Porque en Europa, dijo "o se está o se está de paso. Y el PPE está".

En ese punto, González Pons reivindico que fueron los democristianos los que fundaron la UE "frente al final de la IIGM y frente a la URSS, frente al comunismo y frente a la extrema derecha: la UE somos nosotros", reivindicó.

Y por eso, el político valenciano explicó que "no hay que votar alegremente, sino con alegría y yo sugiero votarnos a nosotros que estamos alegres de ser europeos y celebramos la paz que vino después de la guerra".