Pedro Sánchez ha hecho un mitin entusiasta en Madrid, retocando las declaraciones de Albert Rivera y Pablo Casado para dejarlos como "involucionistas, reaccionarios y retrógrados" delante de la plana mayor de los socialistas europeos. Le ha colgado todas las medallas al PSOE de "crear la sanidad" en España, de "acabar con ETA", y de crear "todas las leyes de igualdad". Y así, machacó a Rivera: "Y contra ese partido ponen un crodón sanitario mientras blanquean a los que quieren atacar los derechos de las mujeres".

El candidato a revalidar en Moncloa reclamó que "dejemos de llamar liberal a quien no es liberal" porque, dijo, "en Europa los liberales hacen gala de no pactar con la ultraderecha y aquí mercadean con las libertades de las mujeres para llegar al poder".

Sánchez igualó a las tres derechas, "que tienen más siglas que ideas", para pasar de Rivera a Casado, afeándole sus declaraciones sobre el aborto y las pensiones. Manipulándolas un poco en tono coloquial con el vicepresidente de la Comisión, Frans Timmermans, en primera fila aplaudiendo a rabiar: "Ha dicho que hay que prohibir el aborto para que haya más pensiones, Frans, ¿te lo crees?".

"Este viernes aprobaremos un decreto con medidas que favorezcan la igualdad laboral entre hombres y mujeres", anunció Sánchez entre aplausos, "porque este Gobierno seguirá siéndolo hasta el último minuto".

Discurso de Timmermans

Antes que Pedro Sánchez habló el candidato de los socialistas a presidir la Comisión Europea, el holandés Frans Timmermans. El actual vicepresidente de este organismo europeo inició su discurso en castellano, para recordar que éstas "son las primeras elecciones para los milenials", que por fin podrán "elegir la Europa que quieren".

Después tuvo una intervención muy encendida con los valores de la izquierda, a los que llamó "la primavera de la esperanza" europea. E incluso presentó al presidente español como "la encarnación de esa primavera, una persona que debe ganar el 28-A y liderar la nueva Europa".

Timmermans había comenzado hablando de racismo y xenofobia -"se nos mueren los últimos testigos del Holocausto, debemos atacar el antisemitismo"-, de impuestos -"si presido la Comisión acabaré con eso de que las multinacionales ganan miles de millones y no pagan impuestos"- y cerró con igualdad de género -"hay que prohibir la violencia de género"-.

Además habló de "cambiar la sociedad y convertir el mundo en algo sostenible", advirtiendo de que ése "no es un mundo para ricos, es de todos, no es un lujo". Y de escasez de vivienda para los jóvenes, "que no se pueden emancipar y eso es injusto". Y así anunció una "alianza de ciudades para que dediquen fondos a viviendas accesibles" cuando él gobierne la Comisión.

Noticias relacionadas