Si todo continúa como publican las encuestas, Vox podría acceder al parlamento andaluz y conseguir de 3 a 5 escaños, como desvela el último sondeo de SocioMétrica para EL ESPAÑOL. De ser así, la cara visible en los debates estos días será la de Francisco Serrano, que ya lideró la candidatura del partido en las últimas elecciones de 2015. Un juez de familia polémico y firme activista contra lo que él denomina "ideología de género". 

Bajo el lema "Reconquistar Andalucía", el candidato del partido de extrema derecha se sube por segunda vez al caballo de unas elecciones. En 2015 lo intentó, pero en esa ocasión no obtuvo representación, logrando tan sólo el 0,5% de los votos y ningún escaño en el Parlamento andaluz. Esta vez cree que "ha llegado el momento de que Andalucía recupere su voz, su orgullo y su dignidad", tal y como publicaba hace unos días en su perfil de Twitter.

El juez estuvo envuelto en una polémica en 2011 cuando fue inhabilitado por prevaricación por malas prácticas en un caso de custodia de un menor. Serrano autorizó a que se prolongara durante dos días el régimen de visitas de un niño con su padre para que participara en una cofradía de Sevilla. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía lo condenó a dos años de inhabilitación y el Tribunal Supremo la elevó a 10 años.

El Constitucional anuló posteriormente la condena y Serrano aseguró que todo fue fruto de una "persecución por sus ideas políticas", en referencia a sus consideraciones respecto a la "ideología de género". 

"Leyes discriminatorias"

Pese a que las cifras oficiales sobre denuncias falsas en los casos de violencia machista se sitúan en menos de un 1%, en 2014 el hoy candidato de Vox lanzó una campaña desde su bufete, Serrano Abogados de Familia, bajo el lema "Mujer sé honesta, denuncia cuando se deba y no cuando convenga", con la que pedía defender a "la verdadera mujer maltratada" y no "a la que denuncia porque le conviene por una serie de intereses". 

En esta línea, el juez defiende tesis como la del "síndrome de alienación parental", a pesar de que el Consejo General del Poder Judicial ha recomendado a los magistrados que dejen de aplicarla. Y aboga por la custodia compartida incluso en los casos de violencia de Género con padres maltratadores. Este mismo viernes defendía esas tesis en un mitin en Almería, donde pidió "sin complejos" derogar la Ley de Violencia de Género. 

En contra de lo dictado por instituciones internacionales como la ONU, y a pesar de que las cifras oficiales recojan una media de 50 mujeres asesinadas cada año en España, Serrano considera que la ley aprobada durante el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero es discriminatoria. 

En su libro La dictadura de Género ahonda en éstas y otras cuestiones y hace una "denuncia pública sobre las políticas de Igualdad y de Violencia de Género y su reflejo legislativo en leyes que pueden estar siendo dramáticamente perniciosas para la Justicia y la Igualdad".

Además de esta cuestión, central en todo su discurso y trayectoria, en sus mítines durante la campaña andaluza también ha trasladado las ideas de Vox a nivel nacional sobre temas como el respeto a la lengua y símbolos españoles, el fortalecimiento de las fronteras, el discurso xenófobo contra la inmigración, o la supresión de las autonomías. Y ha explotado la idea de que "la reconquista empieza en el sur".