Pablo Iglesias ha arrancado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, varios acuerdos en materia de Memoria Histórica. Los más importantes: la anulación de las sentencias del franquismo, la tutela judicial de las víctimas de la dictadura, la construcción de un gran museo y el papel activo que jugará el Ejecutivo en la búsqueda de las fosas.

Además de la exhumación de Franco, Moncloa deberá responder a los compromisos adquiridos con Podemos. Pablo Iglesias aprovechó la rueda de prensa que siguió a su reunión con el presidente para exponer su concepto de la Memoria: sólo hubo demócratas contra fascistas.

El vídeo diseñado por las instituciones del Estado para conmemorar el cuarenta cumpleaños de la Constitución ha soliviantado a la formación morada. Germán y José, de cien años, combatieron uno frente a otro en la batalla del Ebro. Ahora, en el clip recién publicado, se abrazan, alaban la paz y glosan el papel de la Carta Magna en la cicatrización de las heridas. Iglesias considera que la imagen no es justa. Arguye que supone "equiparar demócratas y fascistas", como si en la República que enarbola no se hubiera cometido asesinato o tropelía alguna.

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El secretario general de Podemos quiso poner a Alemania e Italia en el espejo: "Allí sería inimaginable colocar a dos ancianos; uno con un uniforme a rayas del campo de concentración y otro con el de las SS. No sería sensato ni razonable equiparar a un oficial de Mussolini con un partisano". Izquierda Unida, su socio de coalición, apoyó la teoría de Iglesias y criticó una "falta de sensibilidad".

Por primera vez, Podemos verá cristalizar sus ambiciones en materia de Memoria Histórica. Sánchez estaba de acuerdo con exhumar a Franco y construir un gran museo, pero será su socio preferente quien le lleve, por ejemplo, a la localización de las fosas y la anulación de las sentencias del franquismo.

Pablo Iglesias y su partido se refieren a la Guerra Civil como si de la dictadura se tratase. Mencionan a un agresor y a un agredido. En ningún momento de su comparecencia condenó o hizo alusión a los crímenes de las checas o los fusilamientos del Madrid republicano.

Otro de los símbolos de Podemos salió a acompañar a Iglesias. Juan Carlos Monedero, profesor universitario y dirigente de la primera hora, fue más explícito: "Es una jodida vergüenza". Fue el primero en emplear el ejemplo de Alemania. 

En esa línea se expresó también Gloria Elizo, de la coalición Unidos Podemos y vicepresidenta cuarta del Congreso: "Flaco favor a la Constitución, igualar una dictadura fascista con quien defendió la democracia. La reconciliación no es propiedad de políticos. Nace de la verdad histórica y personal de unos y otros, gente corriente arrastrada a la barbarie. La que pone muertos a sus mentiras".

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