El acuerdo de investidura entre PP y Ciudadanos está más cerca. Mariano Rajoy ha trasladado a Albert Rivera que someterá a la votación de la Ejecutiva del PP las seis condiciones de Ciudadanos para apoyar al candidato popular. La dirección popular se reunirá el 17 de agosto, después del puente festivo, y el presidente en funciones ha asegurado que hará todo lo posible para que haya gobierno. "Anteponemos ese interés a cualquier otra cosa", ha dicho. "Es urgente que podamos constituir un gobierno en cuánto sea preciso".

Rivera ha asegurado que si la dirección del PP apoya estas medidas pedirá una reunión con Rajoy para fijar una fecha de investidura y nombrará un equipo negociador para que España tenga un gobierno cuanto antes y negociar reformas económicas, sociales e institucionales. Por su parte, Rajoy ha coincidido en la urgencia de formar gobierno pero ha precisado que no habrá fecha de investidura hasta que decida la dirección de su partido.

Reunión Rivera-Rajoy con las 6 condiciones sobre la mesa

Recogerá medidas del pacto de 'El abrazo'

Rajoy ha vuelto a apelar al PSOE para que mueva su posición. El candidato del PP ha asegurado que si Pedro Sánchez no acepta al menos la abstención "la investidura no es posible". "Seguiré intentado sumar al PSOE a los grandes acuerdos que necesita España. Si el señor Sánchez se mantiene en el no volveremos a repetir las elecciones", ha dicho.

En ese sentido, Rivera, consciente de que la suma de ambos grupos (169 escaños) no es suficiente para la investidura, ha revelado que su partido llevará a la mesa de negociación con el PP varios puntos del pacto de El abrazo suscrito con Pedro Sánchez para tratar de lograr al menos la abstención del PSOE. Rivera no ha concretado esos puntos, pero ha dicho que las seis condiciones previas al pacto con el PP ya estaban recogidas en ese acuerdo con los socialistas.

Rivera exigió el martes a Rajoy seis condiciones de regeneración democrática para negociar un de Ciudadanos a la investidura: apartar a los cargos imputados por corrupción, la supresión de los aforamientos, una nueva ley electoral, acabar con los indultos a condenados por corrupción, la limitación a dos mandatos y una comisión de investigación del caso Bárcenas. El presidente de Ciudadanos puso como condición previa a este paquete de propuestas una sesión de investidura con fecha y hora.

Rajoy no ha querido entrar el fondo de las propuestas. Ni siquiera la de la limitación de mandatos. La condición de Ciudadanos supondría que este segundo gobierno de Rajoy, de salir adelante, sería el último. El líder del PP ha dicho que algunas de las medidas como el de la supresión de los aforamientos requerirán una reforma exprés de la Constitución y otras reformas, como la electoral, del apoyo del principal grupo de la oposición, el PSOE.

"Le he pedido unos días para analizar el documento y todas sus implicaciones", ha dicho Rajoy.

Rivera ha dicho que la reunión con Rajoy, que ha durado algo más de una hora y media en el Congreso, ha transcurrido de manera positiva y cordial y ha confiado en que el PP suscriba las condiciones. "Quién quiera ser presidente del Gobierno de España tiene que suscribir esas condiciones", ha dicho.

"Se viene llorado de casa"

Rivera ha explicado además que la decisión política de Ciudadanos, después de decir durante la campaña electoral que no apoyaría con un a Rajoy, no ha sido fácil. Pero ha dicho que su partido tenía dos opciones: desbloquear la formación de gobierno o que no hubiera gobierno. El líder de Ciudadanos ha asegurado que en las condiciones impuestas al PP se recogen buena parte de los objetivos de regeneración de su partido. 

"En política se viene llorado de casa", ha señalado. "Por España estoy dispuesto a sentarme a negociar con aquellos que no han hecho las cosas bien".

Sobre la posición del PSOE, Rivera ha dicho que confía en que Sánchez no vote en contra de muchas de las medidas que incluyó en su pacto con Ciudadanos la pasada legislatura. Rivera ha dicho que tiene intención de incorporar varios puntos del pacto de El abrazo a su negociación con el PP, en un intento por buscar la complicidad y algún tipo de apoyo del PSOE en forma de abstención a la investidura. Rivera ha descartado cualquier negociación con formaciones nacionalistas como el PNV.

"Doy por hecho que en todo aquello que llevaba en su programa de investidura la pasada legislatura pues (Sánchez) estará a favor", ha afirmado Rivera.