Santiago de Compostela

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha atribuido este viernes la falta de acuerdo sobre el toque de queda en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud a que "los acuerdos no se improvisan", máxime cuando estos plantean "algo tan excepcional y que va a afectar a 47 millones de españoles".

"Algo tan excepcional como aplicar un toque de queda a 47 millones de españoles, con independencia de la situación epidemiológica de los pueblos o ciudades donde vivan, y previamente declarar un estado de alarma otra vez nos parece que es una decisión de enorme trascendencia, no solo sanitaria, sino económica y social", ha señalado.

Así lo ha manifestado durante una visita al Hospital de Burela (Lugo), donde ha señalado que las decisiones "siempre han de ser proporcionadas y proporcionales a la situación del territorio en el que se van a aplicar", lo que ha considerado "una práctica clínica razonable", del mismo modo que "no hay tratamientos generalizados para todos los pacientes, sino específicos para la patología de cada paciente".

En todo caso, Feijóo ha precisadoque su Gobierno sí es partidario de restricciones "tanto diurnas como nocturnas", aunque estas han de ser aplicadas "en los territorios que lo necesiten", que "hoy pueden ser unos y mañana podemos ser otros".

El presidente gallego ha vuelto a expresar que, aunque estas restricciones le parecen "absolutamente sensatas", tiene dudas sobre el uso conceptos como "toque de queda" o "estado de alarma", ya que "no aportan nada a las necesidades de la convivencia con el virus".

"Si volvemos otra vez a activar estados de alarma o toques de queda a toda la población indiferenciada volvemos a lanzar el mensaje de que España es uno de los países con peor gestión de la pandemia en el mundo y creo que ese mensaje nos perjudica como país", ha añadido.

Ante este escenario, Feijóo ha manifestado que Galicia "no renuncia" a aplicar restricciones de este tipo de ser necesario, aunque siempre "sin alarmismo pero con contundencia", a diferencia de cómo, a su juicio, se hace a veces en España.

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