Sevilla

A 16 años de prisión se enfrenta el hijo del escritor andaluz Antonio Perejil acusado de acabar con su vida tras clavarle en el pecho un cuchillo de cocina. Los hechos ocurrieron el pasado 22 de enero en un piso en la zona de la Macarena, en Sevilla, cuando la víctima se encontraba semidormido en el salón de la vivienda.

El hijo, de 28 años de edad, está diagnosticado de trastorno obsesivo compulsivo por consumo de tóxicos y trastorno de la personalidad y se ganaba la vida como aparcacoches en su barrio. En el momento de los hechos además tenía una orden de alejamiento respecto a sus padres por agresiones anteriores.

Un jurado popular lo enjuiciará a partir del día 17 de noviembre en la Audiencia de Sevilla por matar a su padre, que contaba con 65 años de edad. En concreto, según el escrito de la Fiscalía, consultado por EL ESPAÑOL, será juzgado por un delito de asesinato y por otro de robo con violencia con la agravante de parentesco y la eximente incompleta de trastorno mental. Esto último además con reincidencia, ya que cuenta con dos condenas previas. 

La Fiscalía considera que en el momento de los hechos su capacidad de conocer no estaba afectada, mientras que su capacidad volitiva se encontraba limitada de forma importante por su trastorno mental y, especialmente, por su adicción a sustancias estupefacientes.

De igual forma, y en concepto de responsabilidad civil, reclama que el acusado indemnice con un total de 110.550 euros a la esposa y a la hija de la víctima.

El Ministerio Fiscal sostiene que el hijo participó en los hechos "con ánimo de acabar con la vida" de su padre. Para ello, cogió un cuchillo de cocina de 29,5 centímetros de longitud y una hoja de 17,5 centímetros y, de forma sorpresiva, se lo clavó en el pecho.

Intentó defenderse

Este intentó en vano defenderse del ataque, cayendo finalmente al suelo, donde el hijo le asestó varias puñaladas más. Una de ellas penetró en el hemitórax izquierdo y le causó la muerte.

Tras ello, según la Fiscalía, extrajo la cartera del bolsillo de su padre y sustrajo presuntamente 150 euros. Posteriormente, cogió las llaves de un vehículo propiedad del fallecido y abandonó la vivienda familiar cerrando la puerta con llave. Fue detenido poco tiempo después en una avenida cercana a la vivienda.

Antonio Perejil Delay era natural de Nerva (Huelva) y residía en la localidad sevillana de Gerena donde se había establecido y donde había nacido su hijo. Además, trabajó en la mina de Aznalcóllar, hasta que fue prejubilado, y mantenía de forma paralela su actividad literaria.

Su obra estuvo centrada en estudios sobre ferrocarriles mineros de la zona, como El ferrocarril de Aznalcóllar al río Guadalquivir, publicado en 2005. En 2013 escribió otro libro sobre las canteras de granito de Gerena.

Noticias relacionadas