Los Gobiernos de la Unión Europea han acordado este viernes blindarse contra la nueva variante nu del coronavirus aplicando una prohibición simultánea de todos los vuelos procedentes de Sudáfrica y otros 6 países de la región, donde se ha detectado esta mutación altamente contagiosa y que se teme que escape a las vacunas.

La identificación de la nueva variante nu de la Covid-19 ha provocado una alarma general en la UE. El continente europeo ya está siendo asolado por una nueva ola de la pandemia especialmente virulenta, que ha obligado a todos los Estados miembros a adoptar nuevas restricciones. La nueva cepa amenaza con descontrolar la situación por completo.

"Los participantes han acordado imponer de forma urgente restricciones temporales a todos los viajes a la UE desde la región del África meridional, incluida la suspensión de los vuelos de pasajeros de los países afectados", han informado fuentes diplomáticas.

Los países afectados por esta restricción de viajes son Sudáfrica, Botsuana, Esuatini, Lesoto, Mozambique, Namibia y Zimbabue. La prohibición se aplicará por un periodo inicial de 14 días, "hasta que tengamos una comprensión clara del peligro que representa esta nueva variante", según ha dicho la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen.

Los Gobiernos han acordado además que todos los europeos que regresen de estos países deberán someterse a una prueba PCR y también a una cuarentena para cortar en seco cualquier posibilidad de contagio.

Los Veintisiete han hecho uso del denominado "freno de emergencia" que prevé la normativa de la UE para interrumpir los viajes en caso de que se detecte una variante de riesgo de la Covid-19. Aunque su base legal es una recomendación sin valor vinculante, todos los Gobiernos están de acuerdo esta vez en aplicar la suspensión de vuelos.

Adaptar las vacunas

"Nos estamos tomando muy en serio las noticias sobre la nueva variante de Covid altamente mutada. Sabemos que las mutaciones podrían conducir a la aparición y propagación de variantes aún más preocupantes del virus, que podrían extenderse por todo el mundo en unos pocos meses", ha dicho Von der Leyen, en una comparecencia urgente ante la prensa sin aceptar preguntas.

"Ahora es importante que todos nosotros en Europa actuemos con rapidez, decisión y unidad", sostiene.

Von der Leyen ha recordado a los laboratorios que los contratos que han firmado con la Unión Europea les obligan a adaptar la vacuna "inmediatamente a las nuevas variantes a medida que surgen", si se confirma que la versión actual no es eficaz. Lo ha hecho en público después de haber hablado personalmente con los directivos de las farmacéuticas.

Bruselas ha firmado un megacontrato por 1.800 millones de dosis con Pfizer-BioNTech y otro con Moderna por 300 millones de dosis. Ambos contienen cláusulas sobre las variantes, pero hasta ahora nunca han tenido que adaptarse puesto que la fórmula original era eficaz contra todas las mutaciones conocidas, incluida la Delta. 

Para la presidenta de la Comisión, las vacunas continúan siendo la principal arma para frenar al coronavirus. Por eso, ha reclamado a los Estados miembros no sólo acelerar las inyecciones a las personas que todavía no están protegidas, sino también a poner una dosis de refuerzo a toda la población adulta. "Vacúnese lo antes posible, si aún no lo ha hecho. Los refuerzos brindan una protección aún mejor", ha insistido.

Von der Leyen reclama además seguir aplicando las "reglas conocidas para protegerse", como las mascarillas, la distancia social y la higiene de manos. "Esto ayuda a ralentizar la propagación de virus", ha asegurado.

Primer caso en Bélgica

Sin embargo, la variante nu ya ha llegado a Europa. Bélgica ha detectado este mismo viernes el primer caso en toda la UE. La afectada es una mujer joven que ha desarrollado síntomas 11 días después de haber viajado a Egipto vía Turquía y que no ha estado en la región del sur de África, donde se ha identificado por primera vez esta cepa, según ha confirmado el Gobierno belga.

La joven no estaba vacunada ni había pasado la enfermedad y tenía una carga viral elevada cuando fue diagnosticada. Ha desarrollado síntomas similares a una gripe pero no una enfermedad grave. La afectada no ha informado a las autoridades de ningún contacto de riesgo, aparte de su hogar, donde ningún otro miembro ha tenido hasta ahora síntomas.

Tras conocerse este caso, el laboratorio nacional de referencia de Bélgica ha enviado una comunicación a todos los laboratorios de diagnóstico del país para aumentar la vigilancia.

La detección de este primer caso de variante nu se produce el mismo día en que el Gobierno belga ha anunciado una nueva tanda de restricciones por la elevada tasa de contagios de Covid que está sufriendo el país.

A partir del 27 de noviembre, las discotecas y el ocio nocturno tendrán que volver a cerrar en todo el país. Por su parte, los bares y los restaurantes deberán cerrar a las 23:00 horas y no podrán aceptar más de seis personas.

Finalmente, se prohíben las fiestas privadas en interiores, salvo las que se realizan en el hogar y también bodas y funerales. Estas medidas durarán al menos tres semanas.

Bélgica ya exige desde hace semanas el pasaporte Covid para entrar en bares y restaurantes y ha decretado una vuelta al teletrabajo al menos 4 días a la semana.

"La situación ya no es sostenible. Nuestro sistema sanitario comienza a funcionar cada vez peor y eso pesa sobre el personal", se ha justificado el primer ministro belga, Alexander De Croo. "Debemos tomar medidas para reducir el número de camas ocupadas y la presión sobre los médicos", ha señalado.

"Sé que es un momento difícil. Se había anunciado que la protección de la vacuna sería muy buena. Nos protege de forma eficaz, pero el virus es diferente ahora. Hace un año, luchábamos contra la Covid-19, ahora luchamos contra la Covid-21", sostiene el primer ministro belga.