El Gobierno planea destinar 58 millones de euros, a cargo del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, a la "difusión de la cultura y la lengua española" en el extranjero, la "digitalización consular" y la "cooperación digital".

Así consta en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, presentado este miércoles por el Ejecutivo, y que también contempla un aumento del 19,7% de la partida destinada a Política Exterior, que alcanza una dotación de 2.254 millones, frente a los 1.882 de los anteriores. De forma directa, al Ministerio de Exteriores se le asignan 1.543, frente a los 1.443 del año previo.

De ellos, 41 millones se dedicarán a la adquisición del edificio de la embajada española en Londres, tal y como reza el libro amarillo de los PGE.

Asimismo, de forma global, lo destinado al ámbito de la Cooperación para el Desarrollo crece un 59,8 por ciento con respecto a los anteriores PGE, con más de 400 millones adicionales, hasta alcanzar los 1.075.

Esta postura no es nueva —el Gobierno de Mariano Rajoy creó el Alto Comisionado para la Marca España, que añadió posteriormente a su nombre "y Promoción del Español"—, pero que sí continúa la estrategia "transversal" que busca el Ejecutivo, ya avanzada por el presidente Pedro Sánchez, de "aprovechar las enormes posibilidades" del idioma "como lengua universal".

Para ello, el pasado 1 de octubre, el líder del Ejecutivo ya avanzó la creación de una oficina nacional para su fomento, combinada con acciones de carácter internacional, en el marco del "proyecto estratégico" que llevará por nombre El español, valle de la lengua, que también se alimentará de los fondos Next Generation UE.

Según aseguró a EL ESPAÑOL un portavoz del Gobierno, "la idea es aprovechar las enormes posibilidades del español como lengua universal a través de medios digitales e Internet, y generar un ecosistema de innovación que facilite el impulso de un nuevo modelo económico alienado con las demandas de la economía digital global".

Digitalización

La digitalización, precisamente, también será una de las labores pendientes del Ministerio de Exteriores. De acuerdo con el proyecto de PGE, con estos 58 millones, el departamento que encabeza José Manuel Albares también prevé acometer una digitalización de los servicios consulares y la atención a los españoles en el extranjero, "modernizando los sistemas de información y las infraestructuras tecnológicas, adecuándolas a una estrategia orientada hacia el ciudadano, con el fin de dar una nueva orientación al servicio exterior de nuestro país".

Además del crecimiento del 19,7% de la partida para Política Exterior, como novedades relevantes, los nuevos Presupuestos también contemplan un subidón en los fondos destinados a la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo (Aecid), cuyas labores son, entre otras, la "lucha contra la pobreza", "la defensa de los derechos humanos", el "fomento del desarrollo y del equilibrio en las relaciones internacionales" con los países socios, "la prevención y atención de situaciones de emergencia", "la promoción de la democracia" en el extranjero.

Entre las últimas actuaciones de la Aecid —adscrita al Ministerio de Exteriores, Unión Europea y Cooperación, la agencia que contará con un presupuesto de 491 millones de euros para 2022—, destaca la colaboración con este departamento y el de Defensa para la evacuación de ciudadanos afganos que habían colaborado con la delegación española.

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