Dos aviones A400, con capacidad para más de un centenar de personas cada uno de ellos, saldrán desde España con destino Dubái en las próximas horas con un único objetivo: rescatar a las 500 personas, entre personal diplomático, traductores y familiares, que se encuentran actualmente en Kabul.

Los 500 de Kabul, como se les empieza a conocer entre la prensa. Se trata de una operación militar impulsada por el ministerio de Defensa en colaboración con Exteriores en la que se ha cuidado hasta el más mínimo detalle para no dejar nada al azar. Sin embargo, el azar está siendo caprichoso y las circunstancias en Kabul empiezan a ser imprevisibles. 

"La situación de seguridad en Kabul está cambiando rápidamente, incluso en el aeropuerto. Por lo tanto, estamos instando a los ciudadanos estadounidenses a que se queden refugiados en sus lugares", informaba este domingo a través de una alerta la embajada de Estados Unidos (EEUU) en la capital afgana. Y es que es EEUU quien ahora mismo tiene el control del aeródromo Hamid Karzai. Fuentes diplomáticas señalan a EL ESPAÑOL que ese lugar "es casi como una ciudad".

Por eso varios países occidentales han trasladado allí sus embajadas ante la situación de inestabilidad que sufre el país y que se ha incrementado exponencialmente en las últimas 48 horas, tras el asedio de los talibanes.

Pero existe otro motivo por el que las delegaciones diplomáticas han sido trasladadas al aeropuerto: "Mientras los estadounidenses controlen el aeródromo podremos rescatar a los nuestros, pero si los americanos dejan de controlarlo nadie sabe lo que puede pasar", indican estas mismas fuentes.

Se trata de la primera fase de repatriación del personal de la embajada en Afganistán, de los españoles que quedan en ese país y "de todos aquellos afganos y sus familias que durante años han colaborado con nuestro país".

Todas las familias de los 500 de Kabul ya han sido avisadas de que tienen que ir al aeropuerto Hamid Karzai para ser repatriadas. Sin embargo, es imprevisible predecir cuantas personas van a poder llegar hasta allí. Sirva de muestra un botón: hay un traductor que trabaja para las Fuerzas españolas desplegadas en Afganistán y que es padre de familia de 11 hijos. Para más inri, el clan vive alejado de la zona aeroportuaria. Y en la situación actual no es fácil moverse por las calles de Kabul.

"Lou", GOE del "Tercio Ampurdán IV" en el aeropuerto de Kandahar. Cedida

Tampoco es fácil para las aeronaves llegar hasta allí. Los departamentos competentes del Gobierno español han solicitado las autorizaciones de vuelo necesarias en todos los países que han de sobrevolar hasta llegar a su destino.

Una vez que los dos aviones A400 de los militares aterricen en la capital afgana entraría en marcha la siguiente fase del plan. España tiene previsto enviar una aeronave comercial destino Kabul para completar el rescate. La compañía encargada de esta delicada operación sería Air Europa, acostumbrada en los últimos años a realizar este tipo de misiones de la mano del Ejecutivo. Antes de la llegada del avión comercial, los militares españoles deben elaborar un dispositivo para el embarque de los 500 de Kabul de la forma más rápida posible y poner rumbo de vuelta a nuestro país.

Operación compleja

La operación diseñada conjuntamente por los ministerios de Margarita Robles y José Manuel Albares incluye además el envío de un número determinado de soldados, que ascienden como mucho a centenares, según fuentes diplomáticas. Estos soldados formarán parte del convoy que volará a Afganistán junto a un grupo de sanitarios que deberá asegurar el protocolo Covid con el personal desplegado.

Según las mismas fuentes, "en cuanto las circunstancias lo permitan", comenzará la evacuación, que incluirá a afganos que colaboraron durante las misiones militares, al personal diplomático, funcionario y de seguridad de la embajada, así como a los seis españoles que están registrados como residentes en Afganistán, todos en la capital, excepto un funcionario internacional que trabaja para una organización multilateral.

El plan de evacuación exige una logística muy detallada, la coordinación con varios ministerios, una preparación de varios días y un "trabajo intenso". En concreto, Asuntos Exteriores ha estado en contacto con los ministerios de Defensa, Interior e Inclusión, Seguridad Social y Migraciones para coordinar esta evacuación.

El plan español incluye la retirada de todo el personal de la embajada y aseguran que no van a dejar a nadie atrás

Todo esto en medio de la tensión generada por los talibanes, que han sido capaces de tomar el Palacio presidencial en pocas horas y provocar la huida del mandatario Ashraf Ghani, algo que ha impresionado a la onión pública internacional.

A lo largo del domingo, Estados Unidos y varios países occidentales han trasladado al aeropuerto de Kabul a todo el personal de sus embajadas en la capital afgana, que se ha convertido en una improvisada sede diplomática donde se tramitan a toda prisa los preparativos para salir de Afganistán.

Además, la precipitada situación ha provocado que todos los vuelos comerciales con salida desde el Aeropuerto Internacional de Kabul hayan sido suspendidos, y únicamente los aviones militares tienen permiso para sobrevolar el espacio aéreo afgano y poder seguir con las evacuaciones del personal de embajadas y ciudadanos que huyen del país.

El plan español incluye la retirada de todo el personal de la embajada. "No vamos a dejar a nadie", han remarcado las fuentes diplomáticas.

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