El Partido Popular está dispuesto a presentar una iniciativa en el Congreso de los Diputados si fuera necesario para respaldar a todas aquellas administraciones que reclamen al Gobierno ser declaradas zona catastrófica por la borrasca Filomena. El presidente del PP, Pablo Casado, ha brindado "todo nuestro apoyo" a los alcaldes y líderes autonómicos que lo necesiten tras acompañar a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a una visita a la sede de los Servicios de Emergencias 112. 

Antes que el líder de la oposición, ha sido la presidenta de Madrid la que ha vuelto a reiterar el apoyo a los 179 municipios que se extienden por la región, "sean del signo político que sean", para reclamar al Estado que declare en Consejo de Ministros a las zonas más afectadas zona catastrófica."Muchos van a necesitar ayudas extraordinarias ante esta situación sobrevenida. Independientemente del signo político, quiero recordar el apoyo cerrado del Gobierno de la Comunidad de Madrid", insistió la líder regional.

Tras elogiar la gestión del Ejecutivo madrileño ante la mayor nevada registrada en los últimos 50 años, Casado ha pedido al Gobierno de Pedro Sánchez que "para no dejar a nadie atrás hay que garantizar que nadie apaga la estufa porque no pueden pagarla". 

El líder de la oposición se ofreció, como la presidenta de Madrid, a presionar al Gobierno para que decllare zona catastrófica a los lugares más afectados por el alud de nieve. "Esto no solo requiere ayudas directas. También beneficios fiscales y la posibilidad de abrir líneas de ayuda para comerciantes y vecinos", zanjó Casado, que pidió "unidad de acción" a sus rivales: "Los españoles quieren que estemos todos a una".

Casado puso en valor la coordinación de los efectivos de seguridad como ejemplo de que "ante las catástrofes tenemos que estar todos unidos". El líde de la oposición agradeciónn la labor de los alcaldes y de la Administración General del Estado personificada e  la ministra de Defensa, Margarita Robles, "por la gran labor de la UME en la retirada de la nieve" en los puntos más críticos de la geografía española.

Zona catastrófica

En un primer momento, el Gobierno cerró la puerta a la primera petición pública del alcalde de Madrid. José Luis Martínez-Almeida hizo público el sábado que su intención era solicitar al Ejecutivo central que declarase a la capital como zona catastrófica. El ministro Fernando Grande-Marlaska, en un principio, aseguró que no había desperfectos de gran magnitud como para abrir esa opción.

El Gobierno se vio obligado a rectificar y ahora simplemente dice que "hay que cuantificar los desperfectos" ocasionados por la borrasca y, posteriormente, se evaluarán los daños. Las administraciones afectadas -ayuntamientos o comunidades autónomas- tienen quince días desde que se produce el temporal para presentar al Estado el informe preceptivo que avale la solicitud. El plazo termina el sábado 23 de enero.

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