Daniel Ramírez Íñigo Zulet

"No me voy a rendir nunca". El presidente del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, ha dicho que su partido está dispuesto a hablar "en serio" para formar gobierno y ha asegurado que seguirá "luchando" por España y por el interés general de los españoles "hasta el final". Lo ha hecho en Guadamur -localidad toledana de alrededor de 1.800 habitantes- acompañado de la número dos de su partido y presidenta del PP en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal.

"Si alguien quiere hablar, nosotros estamos dispuestos a hablar, pero no estamos dispuestos a continuar con este espectáculo que no conduce a parte alguna", ha afirmado refiriéndose a la investidura fallida de Pedro Sánchez.

Rajoy ha vuelto a pedir un pacto entre PP, PSOE y Ciudadanos que lo haga a él presidente: "Dijimos que lo mejor era una coalición entre los dos primeros partidos. Después, aceptamos la entrada de Ciudadanos, aunque sus votos no sean necesarios. Pero este Gobierno debería estar presidido por quien ganó las elecciones".

"Iré a la investidura cuando tenga los votos suficientes. Nuestra posición es la más razonable y sensata. Lo sabe todo el mundo", se ha confiado Rajoy. Tras defender su postura, ha calificado de "terrible" un posible Ejecutivo de izquierdas apoyado por los partidos nacionalistas.

A favor de las diputaciones

Entre dos paneles blancos y verdes de Nuevas Generaciones y los aplausos que interrumpían su discurso una o dos veces por minuto, Rajoy ha clamado en favor de las diputaciones. "Es muy difícil que los pequeños municipios puedan sacar adelante los servicios públicos que prestan sin la ayuda de las diputaciones", ha dicho Rajoy.

"Hay gente que vive veinticuatro horas en moqueta, pero deberían saber que el mundo rural también existe". En este punto, las palabras del presidente en funciones han sido acalladas por una ovación.

El jefe del Ejecutivo en funciones se ha agarrado a la Carta Magna para atacar uno de los puntos que recogió el pacto de El Abrazo entre PSOE y Ciudadanos: la supresión de estos organismos. "Todos los españoles somos iguales. Lo dice la Constitución. Este partido seguirá defendiendo el mundo rural y la existencia de las diputaciones, que han prestado un magnífico servicio a mucha gente".

Rajoy ha sacado pecho de su experiencia como presidente de la Diputación de Pontevedra para atacar de nuevo a Ciudadanos por querer eliminar estas instituciones. Según el partido de Albert Rivera, las diputaciones son "cementerios de elefantes que sólo sirven para colocar a gente".

Asimismo, la formación naranja también aboga por fusionar municipios pequeños con el objetivo de mancomunarlos y que se pueda mejorar la prestación de servicios. Rajoy no ha dudado en aprovechar el contexto geográfico -Guadamur no supera los 2.000 habitantes- para arremeter contra el discurso de C's. Ha insistido en la importancia de los pueblos y la labor que realizan las diputaciones. 

"Los ayuntamientos no pueden sacar adelante los servicios si no tienen diputaciones. Este partido defenderá el mundo rural y la existencia de las diputaciones provinciales que han prestado una magnifica labor a mucha gente", ha dicho Rajoy.

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