La empresa pública Ineco, dependiente del Ministerio de Fomento, realizó un Expendiente de Regulación de Empleo (ERE) en 2013 para rebajar su plantilla en 381 personas. Sin embargo y según la documentación que obra en poder de EL ESPAÑOL, tras fingir una reducción considerable de su masa salarial, la sociedad que construye los trazados de tren en España contrató a 231 personas a través de una ETT (Empresa de Trabajo Temporal).

Sobre el papel, este tipo de proveedores deben servir para cubrir puestos eventuales y necesidades puntuales de producción. Sin embargo, Personal7, la empresa utilizada por Ineco y que ha conseguido desde 2014 contratos por valor de 6,5 millones de euros con la empresa pública, mantiene contratados a técnicos con sueldos superiores a los 2.900 euros mensuales y fechas de finalización de contrato fijadas para 2018.

Fragmento de uno de los contratos formalizados por Personal 7.

Según documentación en poder de EL ESPAÑOL, el maquillaje de la plantilla comenzó poco después de que la empresa pública presentara su ERE. Por parte de la compañía, la medida fue impulsada por Pablo Vázquez -director de la empresa pública hasta octubre de 2014 y actual presidente de Renfe- y Berta Barrero, su mano derecha tanto en Ineco como ahora en Renfe. La documentación que acredita el primer encargo a Personal 7 por 4,5 millones de euros fue retirada por Ineco de su portal de Transparencia el pasado mes de enero.

Entre los trabajadores contratados por Personal7 hay, por un lado, personal contratado por "acumulación de tareas" y, por otro, profesionales con contratos por obra. Puestos de trabajo sujetos a proyectos puntuales de Ineco como el trazado de alta velocidad entre Madrid y Valladolid que se alargan en algunos casos hasta 2018.

24 trabajadores rescatados

El acuerdo entre Ineco y su plantilla contemplaba además la creación de una bolsa de trabajo; un listado de despedidos que tendrían “derecho preferente de recolocación” y debían ser contratados de nuevo si la empresa necesitaba de un profesional con su perfil en los próximos tres años. De los 328 afectados por el ERE, solo 80 personas se dieron de alta en la bolsa de trabajo. ¿Cómo se explica eso? Varios de los afectados revelan a EL ESPAÑOL que Ineco mantuvo en todo momento que la entrada en esa bolsa sería inmediata. Los afectados serían inscritos de forma automática. Sin embargo, no fue así.

Uno de los contratos temporales firmados para Ineco.

En un correo enviado el 14 de febrero de 2014, los responsables del comité de empresa informaron a los despedidos de que nadie estaba dado de alta en el listado. Mientras los afectados esperaban a ser llamados y restituidos en su puesto, Ineco contrataba ya por otro lado. Lo hacía por medio de Personal 7 y sin contar con ellos.

En los días posteriores, casi un año después de que comenzaran los primeros despidos en la empresa dependiente de Fomento, 80 trabajadores se dieron de alta en la bolsa de trabajo. Hasta septiembre de 2015, solo 24 de ellos habían sido readmitidos. Y entre ellos, 13 lo hicieron también por medio de la ETT, algo que sobre el papel incumple los acuerdos firmados por Ineco, que reflejan la necesidad de conservar “la antigüedad a todos los efectos”.

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