Ko Barrett (investigadora del IPCC):  La próxima década es crítica, pero aún podemos frenar el calentamiento global

Ko Barrett (investigadora del IPCC): "La próxima década es crítica, pero aún podemos frenar el calentamiento global"

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Ko Barrett (IPCC) y la hoja de ruta para sobrevivir al cambio climático: "La próxima década es crítica"

La investigadora estadounidense, primera vicepresidenta del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas, habla con ENCLAVE ODS sobre el nuevo informe de la entidad.  

1 marzo, 2022 03:22

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El pasado agosto, el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas publicaba el borrador de su sexto informe sobre el estado del planeta. En él, alertaba de las catastróficas consecuencias de la crisis medioambiental para nuestro país, y para el mundo entero.

Ayer, veía la luz su segunda parte, que reitera, como dice la vicepresidenta del IPCC y una de las investigadoras principales del texto, Ko Barrett, que "la Tierra se está calentando más rápido de lo que creíamos, lo que está creando todo tipo de fenómenos climáticos extremos como inundaciones, sequías, lluvias torrenciales, etc.". Sin lugar a dudas, "los humanos somos los principales responsables de estos cambios y tenemos muy poco margen de maniobra para evitar que las peores consecuencias de la emergencia climática sucedan".

Sin embargo, la investigadora estadounidense recuerda a ENCLAVE ODS que "este informe ahonda en esas conclusiones" que ya conocíamos. Porque, asegura, "cada fracción de grado que aumenta la temperatura importa y cada acción ayuda, pero estamos en una carrera de fondo y nuestros rivales son esos riesgos que aumentan según el planeta se calienta".

Un koala rescatado en un bosque en llamas cerca de Cape Borda en la isla Canguro, al suroeste de Adelaida, Australia, el 7 de enero de 2020.

Un koala rescatado en un bosque en llamas cerca de Cape Borda en la isla Canguro, al suroeste de Adelaida, Australia, el 7 de enero de 2020. Reuters

Según la experta, el margen de maniobra del que disponemos para adaptarnos a la nueva realidad de nuestro planeta es pequeño. Pero, insiste, lo bueno es que conocemos cuál es la solución: "Frenar el calentamiento; eso es algo que tenemos que controlar ya".

Y precisamente el informe del grupo II del IPCC publicado ayer, titulado Cambio climático 2022: impactos, adaptación y vulnerabilidad, ahonda en la necesidad de que las sociedades se adapten, especialmente a través del desarrollo climáticamente resiliente, que cobra especial importancia para la investigadora. "Es una tarea urgente para los países en desarrollo, donde no tienen las inversiones necesarias ni los recursos para llevar a cabo los desarrollos que están planificados para adaptarse a los desafíos adicionales que supone el cambio climático", explica Barrett. 

Pero, recuerda, "el desarrollo climáticamente resiliente también es fundamental para mi país, Estados Unidos, y para cualquier otro país desarrollado". Porque, asegura, "todos nos estamos desarrollando de una manera u otra y todos tenemos la necesidad de incorporar la información climática en nuestra planificación". Porque esta es esencial, como cuenta, para rediseñar las ciudades o enfrentarse a sequías o inundaciones.

"El informe no habla sólo de los problemas, sino también de las soluciones"

Aun así, insiste, "las personas que son especialmente vulnerables en la sociedad lo son aún más al cambio climático. Y este informe hace que pongamos el foco en los menos privilegiados, en los vulnerables y en los más pobres".

La adaptación por bandera

Para Barrett, lo más interesante del nuevo informe del IPCC es la manera en la que se aborda la adaptación adaptación al cambio climático. Esto es, que responde a tres preguntas, para ella, esenciales: "¿Es efectivo, es decir, funciona?, ¿es factible, podemos hacerlo?, ¿es justo, estamos adaptándonos de manera que no perjudiquemos a los más vulnerables?". Respondiendo a todas ellas, el informe va dibujando las posibilidades de cada región para construir un mundo más resiliente. 

La científica, que ha representado durante 15 años a Estados Unidos en las conferencias del clima, recuerda que uno de los principales descubrimientos de este informe es que "los riesgos climáticos aumentan a la par que las temperaturas", aunque, asegura, "no es nada nuevo: los científicos llevamos diciéndolo desde hace años". Lo que sí es nuevo es contar con evidencia científica irrefutable.

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A la pregunta de si el informe dibuja un futuro pesimista o no Barrett responde que no. Porque, puntualiza, "en él no hablamos sólo de los problemas, sino también de las soluciones". Y añade: "El informe se presenta como una hoja de ruta para entender qué significan estos cambios para el presente y para el futuro y qué podemos hacer para evitarlo".

Y es que el IPCC presenta, por primera vez, un texto en el que las soluciones ocupan el grueso del texto y hay ejemplos específicos de qué puede pasar y cómo evitarlo. Además, según la vicepresidenta del panel de expertos, "también hace hincapié en la necesidad de movilizar recursos para ayudar a la gente a que se adapte". E insiste: "Si queremos tener la más mínima posibilidad para continuar en esta carrera de fondo, necesitaremos hacernos cargo de los impactos cada vez más frecuentes a lo largo y ancho del globo".

Una década crítica

El informe pone especialmente de relieve la estrecha conexión entre los seres humanos y la naturaleza, y cómo en esta se pueden encontrar soluciones a los problemas, incluso para las ciudades. "El texto propone que en las urbes se incrementen los espacios verdes para combatir el calor extremo que vemos en muchas de ellas. También nos explica cómo enfrentarnos a las riadas y a las inundaciones que vemos en tantas ciudades", recuerda Barrett. 

"No hay nada más deprimente que pensar que no tienes margen de maniobra para abordar todos esos asuntos que te preocupan"

Porque, como dice, "la próxima década es crítica para frenar el calentamiento global" e impedir que la temperatura terrestre suba por encima de 1,5 °C, tomando como referencia el periodo preindustrial. "Una de las mayores fortalezas de este informe es que visibiliza los diferentes tiempos que cada región del mundo necesita y tiene para adaptarse" a ese objetivo. Porque, admite, "no hay nada más deprimente que pensar que no tienes margen de maniobra para abordar todos esos asuntos que te preocupan".

Pregunta: ¿Cuál ha sido el hallazgo más impactante de este informe?

Respuesta: Lo más impactante, en general, es la información relacionada con las cosas que más te importan. Para mí, que tengo raíces en los Apalaches del este de Estados Unidos, han sido todos los datos sobre cómo esa zona es un punto caliente de biodiversidad y que los cambios en esa región suponen una transformación en su potencial riqueza natural. También me sorprenden los cambios en los patrones e intensidad de los incendios forestales en el oeste del país son preocupantes y hayamos perdido por su culpa una masa forestal del tamaño de Suiza es un descubrimiento mayúsculo.

Para España, por ejemplo, la experta remarca que los desafíos serán diferentes: "La información que el informe ofrece sobre la región mediterránea es poderosa". Como, por ejemplo, que el calentamiento global está haciendo que los ecosistemas mediterráneos sufran sequías cada vez más severas y frecuentes.

"Cada fracción que aumente la temperatura importa"

Y es que, insiste, "cada fracción que aumente la temperatura importa. Si llegásemos a los 3 °C, en la mayoría de los casos sobrepasaríamos nuestra habilidad para adaptarnos". Por eso, recomienda, "tenemos que seguir trabajando lo más intensamente posible para rebajar el calentamiento global, y eso hay que hacerlo también a través de la mitigación". Porque pasar el límite de los 3 °C es peligroso para la biodiversidad, para la seguridad alimenticia y para garantizar el acceso al agua en la mayoría del planeta.

Por eso, Barrett recuerda que el informe del IPCC es "un baño de realidad, pero también una hoja de ruta para la acción. Y es muy importante verlo dentro de ambos contextos. Perder o no especies y tierras de cultivo y donde vivir dependerá de las acciones que llevemos a cabo en esta década". Por suerte, "aún hay margen de maniobra para que la temperatura se mantengan por debajo de los 1,5 °C o cercano a ella, y también para cambiar a las sociedades. Aún estamos a tiempo", remarca la científica.

Pregunta: ¿Se están llevando a cabo las acciones necesarias para ello?

Respuesta: Mira, aquí en Estados Unidos la Super Bowl es uno de los eventos deportivos más importantes que se televisa. Y los anuncios son una parte esencial de la experiencia. En la de este año, casi todos los anuncios eran de coches eléctricos. Casi todos. Ver que el mayor evento del año apuesta por ese mensaje es un testamento de la manera en que las cosas están cambiando.

P.: Entonces, ¿hay esperanza?

R.: Cuando pienso en el futuro, en si hay esperanza, pienso en la Super Bowl, en cómo la sociedad se está transformando. La sostenibilidad es cada vez más mainstream, y hay ejemplos en todo el mundo de ello.

"Cuando pienso en si hay esperanza, pienso en la Super Bowl, en cómo la sociedad se está transformando"

P.: ¿Cuál es el próximo paso? ¿Qué deberían haces los Estados con este informe?

R.: Nosotros aportamos evidencia científica, pero no le decimos a los políticos qué hacer. Pero desde un punto de vista científico, les diría a los dirigentes que usen este informe para repensar la manera en que se están enfrentando al cambio climático para centrarse en la resiliencia y la adaptación que debería llevarse a cabo en los próximos años a la par que abordan la verdadera solución contra el cambio climático, es decir, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

P.: Mitigación y adaptación van de la mano.

R.: Proponemos un acercamiento en dos planos que nos ayudará prosperar en el corto plazo mientras resolvemos el problema a futuro.