Un estudio internacional ha revelado nuevas evidencias sobre el comportamiento del nivel del mar en el pasado geológico. Lo ha hecho a partir del análisis de corales fósiles hallados en las islas Seychelles, situadas en el océano Índico.
La investigación, cuyos resultados fueron publicados en la revista Science Advances, ha sido liderada por la profesora Andrea Dutton, de la Universidad de Wisconsin-Madison, y la estudiante de doctorado Karen Vyverberg, de la Universidad de Florida.
También han participado científicos de la Universidad de Sídney, la Universidad de Minnesota Twin Cities, la Universidad Victoria de Wellington y la Universidad de Massachusetts Amherst.
La clave del hallazgo se encuentra en que los corales fósiles utilizados en el reporte pertenecen a especies que solo sobreviven en aguas poco profundas, convirtiéndolos en indicadores precisos del nivel del mar en el momento en que crecieron.
Esta característica, sumada a la ubicación tropical de las islas Seychelles —alejadas de las grandes capas de hielo que existieron en el pasado—, permite reducir la influencia de los efectos regionales de deformación del terreno y facilita una estimación más fiable del nivel medio global del mar.
Máximo global
El equipo científico analizó dos docenas de corales fosilizados encontrados en diferentes elevaciones de las islas y examinó los sedimentos que los rodeaban.
Mediante métodos de datación y análisis geológicos, los investigadores lograron reconstruir una secuencia detallada de los cambios en el nivel del mar durante el período conocido como el último periodo interglaciar, hace aproximadamente entre 122.000 y 123.000 años.
Se trata de un intervalo que, según indican los expertos, se emplea como referencia dado que presentaba temperaturas globales similares a las actuales.
Ahora, los resultados del estudio confirman que el nivel del mar alcanzó un máximo global durante este periodo. Sin embargo, el hallazgo más significativo del análisis es la identificación de tres pulsos de aumento rápido y abrupto del nivel del mar en los 6.000 años previos a ese pico.
Según los datos recopilados, estos aumentos estuvieron interrumpidos por fases en las que el nivel del mar descendió, configurando un patrón oscilatorio.
Los investigadores vinculan estos pulsos a variaciones en las grandes capas de hielo de Groenlandia y la Antártida. Pues, estas masas de hielo están situadas a miles de kilómetros de las Seychelles y los registros sugieren que sus cambios de volumen tuvieron efectos de alcance global en el nivel del mar.
Temperatura desigual
El estudio también señala que, durante el último periodo interglaciar, los incrementos de temperatura no se produjeron de forma simultánea en los hemisferios norte y sur.
Esta desincronización habría provocado que las capas de hielo polares crecieran y se contrajeran de manera no coordinada, generando oscilaciones del nivel del mar.
A partir de esta observación, los autores han comparado la situación actual, en la que el calentamiento global se da al mismo tiempo en ambas mitades del planeta.
Además, los investigadores identificaron un pulso de incremento del nivel del mar que coincide, temporalmente, con el posible colapso de los últimos restos de una capa de hielo en América del Norte.
La subida del nivel del mar en la Baía da Traição, Paraíba, Brasil.
Hasta ahora, esta capa de hielo norteamericana no había sido considerada un factor relevante en los estudios sobre el comportamiento del nivel del mar durante este periodo.
Sin embargo, el equipo plantea que, si dicha masa de hielo persistió varios miles de años después del máximo cálido anterior, parte del aumento del nivel del mar detectado en los fósiles de coral debería atribuirse al derretimiento de otras capas de hielo, como las de la Antártida.
Esta interpretación sugiere una participación mayor de las masas de hielo antárticas en el incremento del nivel del mar durante ese período.
El nivel del mar
Según los investigadores, los datos extraídos de los corales permiten observar un patrón de variabilidad en los niveles marinos que implica cambios rápidos tanto en el volumen de las capas de hielo como en la elevación del mar.
Este comportamiento no lineal del sistema glaciar-marino es relevante para estudios que proyectan escenarios futuros en función del calentamiento actual.
Por ese motivo, el estudio considera que, en función del nivel de calentamiento ya alcanzado en la actualidad, el aumento potencial del nivel medio global del mar podría superar los 10 metros a largo plazo.
Así, la información recogida en los fósiles de coral de las Seychelles permite reconstruir con mayor detalle la dinámica del nivel del mar durante el último glaciar, un período climático análogo al presente en términos de temperatura.
El estudio plantea, además, que la sensibilidad de las capas de hielo ante variaciones térmicas podría ser mayor de lo que se ha estimado hasta ahora. Y es que los registros encontrados en las Seychelles, al no estar influenciados por deformaciones isostáticas significativas, proporcionan un marco fiable para examinar estos fenómenos con mayor precisión.
