Luka Modric se ha convertido en la última década en uno de los mejores futbolistas del mundo y de la historia. Seguramente, el mejor en su puesto y en sus características más básicas. Nadie dirige el centro del campo como él, ni tiene esa capacidad para conducir el balón, para llevar el peso y el control de un partido y para imaginar y crear pases imposibles. Su último ejemplo lo dejó en el encuentro de vuelta de la eliminatoria de cuartos de final de la Champions contra el Chelsea.

Su pase a Rodrygo con el exterior que inició la resurrección del Real Madrid ya es historia de la competición y es que fue una asistencia que nadie más pudo imaginar, solo él y el exterior de su bota derecha, algo que ya es patrimonio mundial del fútbol. Ese fue el cuarto pase de gol que daba el croata en el torneo.

Sin embargo, lo que más asombra de Luka Modric no son sus pases, sus conducciones o sus precisos disparos. Lo que más maravilla al fútbol es que lleve tantos años de dominio incuestionable y que a pesar de haber cumplido ya los 36, siga mostrándose con el hambre y con la capacidad física de quien empieza en esto del fútbol.

Cada año que pasa, Modric parece estar viviendo el caso de la mítica película protagonizada por Brad Pitt, Benjamin Button. Para el balcánico, cada año que pasa también parece más joven. Y esto, también tiene un secreto: el método Vucetic.

Luka Modric, durante el calentamiento. Real Madrid

Quién es Vlatko Vucetic

Luka Modric lleva varios años trabajando con la persona que guarda el verdadero secreto de su eterna juventud. El fútbol ha cambiado mucho en los últimos tiempos. Cada vez importa más el físico que el talento. Los jóvenes cada vez se someten a métodos de entrenamientos más eficientes y exigentes y son capaces de llegar antes a la élite. Y los veteranos, cada son capaces de aguantar y exprimirse más porque conocen más y mejor sus cuerpos.

Ahora se aplican sistemas de recuperación del esfuerzo o de las lesiones, mayor control de la alimentación y el descanso, mayor número de terapias complementarias a los entrenamientos y mayor dedicación por parte de todos los profesionales. Por eso son capaces de alargar sus carreras y encontrar su mejor nivel por encima de los 30 años, algo que antes era impensable. Sin embargo, lo de Modric es un caso excepcional incluso para los tiempos que corren.

El principio básico de todo es que Luka es una fuerza de la naturaleza, un deportista con unas capacidades naturales únicas y que no todos pueden aguantar todo lo que él, y unos elegidos más, pueden soportar. Sin embargo, incluso eso hay que trabajarlo, y ahí es donde entra la labor de su guía, Vlatko Vucetic, su kinesiólogo personal.

Vlatko es un excorredor de los 5.000 metros en pista que llegó a ser campeón nacional de atletismo en Croacia. Después de una vida dedicada a correr, ahora aplica sus aprendizajes y sus métodos en otras disciplinas como el fútbol. Algo que a Luka Modric le está dando unos resultados completamente increíbles.

Vucetic prepara su trabajo con el centrocampista del Real Madrid en base a una serie de pilares básicos: el estado de salud y el estilo de vida de Luka, sus parámetros morfológicos, sus habilidades motoras, su capacidad energética, aeróbica y anaeróbica, sus factores cognitivos, su inteligencia y la búsqueda de su bienestar socioeconómico y familiar.

En base a esto, establece un análisis científico para conocer al detalle cómo se encuentra el cuerpo de Luka a nivel óseo, muscular, tendinoso y de cualquier tipo de tejido. Además, combina este tipo de estudios con evaluaciones de las capacidades en acción del jugador croata para saber en todo momento cómo se comporta en los partidos y en los entrenamientos. Así es como Vlatko Vucetic alcanza el concepto de inteligencia motora o kinestésica.

Luka Modric, en un entrenamiento del Real Madrid Real Madrid

Los entrenamientos cruzados

Una parte fundamental de la nueva preparación física que llevan a cabo los deportistas de élite, y en particular los futbolistas, es dar una evolución al trabajo que hace en sus disciplinas, pero fuera de ellas. Es decir, continuar lejos de los terrenos de juego con sus trabajos de cuidado y perfeccionamiento. Y una terapia muy productiva en este tipo de escenarios son los entrenamientos cruzados. 

Vlatko Vucetic también apuesta por ellos y los ha introducido en los programas de trabajo de Luka Modric. El preparador croata considera básico que los jugadores de élite tengan un entrenador de acondicionamiento individual fuera del personal con el que trabajan en sus clubes. Por eso, el mundo de la preparación física ha cambiado tanto en los últimos 15 años. 

Ahora, el acondicionamiento físico de los jugadores es una tarea que dura 24 horas al día y 365 días al año. Es decir, continúa más allá de sus jornadas de trabajo sobre el césped e incluso en periodos fuera de competición. Por eso, Vucetic continúa trabajando con Luka incluso cuando está de vacaciones. Cómo gestionar el descanso también es parte de ese trabajo. 

En esos periodos principalmente es donde entran en juego los entrenamientos cruzados. Estos consisten en practicar alguna disciplina que complemente alguna habilidad que ellos necesitan cuando están dentro del terreno de juego, pero que no implique necesariamente tener el balón en los pies. Vlatko considera que estos trabajos extra también tienen que ir de la mano de los gustos que tengan los futbolistas y, en definitiva, las personas. Por eso, en el caso de Luka apuesta decididamente por el tenis. 

Junto con el deporte de la raqueta, Modric también pone en práctica los consejos de runner que su preparador le cede, ya que no deja de ser su mundo original. Vucetic cree que es esencial que sus métodos integren rutinas de estas disciplinas. Es a través de ellas mediante las que trabaja la mejora de sus capacidades aeróbica y anaeróbica. 

Luka Modric aplaude al Santiago Bernabéu. AFP7 / Europa Press

A pesar de que estos trabajos alternan sesiones de velocidades altas con otras de ritmos más reducidos y distancias más largas, son esos momentos a alta intensidad los que mayor provecho dan a Modric. Consiste en correr por encima de la capacidad máxima de recuperación en un corto período de tiempo para después descansar lo suficiente y retornar al trabajo de alta intensidad.

Para Vucetic, es más útil llevar a la excelencia la explosividad del jugador con estos métodos para marcar la diferencia a los 36 años y después aprender a gestionar su energía durante los 90 minutos, incluso por encima de hacer sesiones largas a poco ritmo que pudieran simular un partido completo. Aquí interviene de nuevo la inteligencia motora del deportista a partir de los entrenamientos cruzados, ya que trabaja como un corredor profesional dentro de un campo de fútbol en función de lo que necesita. 

Estos entrenamientos cruzados son cada vez más frecuentes en la preparación de grandes deportistas. Algunos como Robert Lewandowski o Zlatan Ibrahimovic apuestan por las artes marciales y los deportes de contacto como el taekwondo o el kick boxing. Curiosamente, otros dos casos de futbolistas que han conseguido alargar de manera impresionante su carrera sin reducir su nivel. 

Una carrera de larga duración

Con estos principios, Luka Modric está consiguiendo alargar su carrera deportiva de manera increíble. Lo que más llama la atención no es que pueda seguir jugando a los 36 o que sea capaz de mantenerse como titular en un equipo de máxima exigencia como el Real Madrid. Es que pueda rendir al nivel tan alto al que lo hace. Cuando parece que va a ser su último año, el croata sorprende de nuevo demostrando que sigue sin tener rival en su puesto.

Además, lo hace con un índice de lesiones muy reducido para la enorme cantidad de minutos que disputa. Esta temporada, el genio de Zadar ya ha jugado 37 partidos y supera la barrera de los 2.800 minutos entre todas las competiciones. Tiene el objetivo de renovar al menos un curso más con el Real Madrid para disputar otra temporada y espera superar las 150 internacionalidades con la selección croata disputando la Copa del Mundo de Qatar 2022

Modric lleva ya un tiempo trabajando con Vucetic y los resultados son inmejorables. Aplica todos sus consejos y van probando cuáles se adaptan mejor a su físico y a su salud mental dependiendo del momento de la temporada en el que se encuentren. Otra parte fundamental de la inteligencia motora. Además, el kinesiólogo de Luka añade una rutina más a su preparación que es básica para un jugador de su edad. 

Se trata del trabajo con bandas elásticas, las cuales aportan flexibilidad y elasticidad al jugador mejorando su salud y su estado muscular. Si un jugador, con los años, gana en rigidez, su carrera se reducirá drásticamente y aparecerán más frecuentemente problemas de lesiones que se pueden volver incluso crónicas, empujándole a una retirada prematura. Con todo este tipo de trabajos y con las capacidades naturales que tiene Modric, es posible que pueda llegar a un gran nivel incluso rozando los 40 años. 

[Más información: La fórmula de la eterna juventud de Modric y Benzema: 2 viejos rockeros que hacen bailar al Madrid]

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