Otra decisión arbitral a favor del Real Madrid y otra polémica buscando restar méritos al conjunto blanco en su quinta victoria seguida. La acción de la roja directa a Remo Freuler, del Atalanta, por su entrada a Ferland Mendy en el minuto 18 ha generado un sinfín de debates. Una decisión justa del colegiado que ha generado mucho más ruido que otra acción clave de la que no se dijo nada.

Ocurrió un poco antes de la expulsión de Freuler, en el minuto 14. En un balón dividido, Pierluigi Gollini, guardameta del Atalanta, salió del área a despejar un balón hacia el que se dirigía también Vinicius. El italiano logró sacar el balón con la cabeza y, en principio, ahí se quedó la acción. Sin embargo, las imágenes repetidas muestran un movimiento peligroso del meta local que no fue sancionado y que podía rondar la expulsión.

Gollini deja el pie. En el salto para sacar el balón se lleva por delante a Vinicius y le clava la planta de la bota en el muslo, además de levantar la pierna a una posición peligrosa. El colegiado no señaló nada y la acción pasó casi inadvertida, mientras que pocos minutos después se armó un importante escándalo por la expulsión de Freuler.

Victoria blanca

El primer gol en la Champions League del francés Ferland Mendy, con un derechazo curvado desde fuera del área en el minuto 86, derribó este miércoles el muro del Atalanta, que compitió setenta minutos con diez hombres, y le dio al Real Madrid un valioso 1-0 en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones.

Sin nueve jugadores, sin el liderazgo defensivo de Sergio Ramos ni los goles de Karim Benzema, fue Mendy el líder madridista. Provocó la expulsión, severa, del suizo Remo Freuler en el minuto 18 y se inventó a cuatro minutos del final la jugada decisiva que premió el empuje de noventa minutos de los hombres de Zinedine Zidane.

El Real Madrid, que volvió a ganar en una eliminatoria de 'Champions' dos años después, cuando se impuso en la ida contra el Ajax, se llevó a Valdebebas un triunfo importante, a la espera de recuperar a más piezas clave y blindar en el partido de vuelta del 16 de marzo su billete para los cuartos de final.

Ante el poderío ofensivo y la verticalidad del Atalanta, que tiene segunda mejor delantera de la Serie A y es el máximo anotador liguero en las últimas dos temporadas, Zidane apostó por Isco de falso 'nueve', para dar a su equipo más técnica y densidad en el centro del campo e intentar abrir espacios en la agresiva zaga rival.

El malagueño, que no era titular desde el 20 de enero, en el día de la eliminación de la Copa del Rey contra el Alcoyano, interpretó positivamente el plan de Zidane. Tocó con calidad y atrajo la presión de los defensas de Gasperini para premiar las incursiones de Vinicius y de un excelente Mendy.

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