No todo fueron buenas noticias en la victoria del Real Madrid contra el Granada en el estadio Alfredo di Stéfano. Sexto triunfo consecutivo para los de Zidane, que deja un sabor agridulce por la lesión de Rodrygo, quien se tuvo que marchar en camilla del terreno de juego en el minuto 37. 

En carrera con Foulquier, Rodrygo fue metiéndose en el área después de galopar por la banda izquierda, pero fue justo al internarse cuando se llevó la mano a la parte posterior del muslo de su pierna derecho, acabó tumbado en el suelo y pidiendo el cambio de inmediato al banquillo madridista.

Las alarmas saltaron, sobre todo porque el jugador pese a recibir el soporte de las asistencias médicas, no pudo ni siquiera abandonar el terreno de juego por su propio pie, sino que tuvo que hacerle en camilla y entre lágrimas, tapándose la cara camino a los vestuarios.

Las primeras aproximaciones han confirmado que sufre una lesión en el isquio de su pierna derecha y que será en el plazo de entre 48 y 72 cuando se le harán más pruebas al futbolista para conocer el alcance definitivo de la lesión y el tiempo estimado de baja. A la espera, el propio Rodrygo ha publicado un mensaje en sus redes sociales.

"'El llanto puede durar una noche, pero la alegría llega por la mañana' ¡Ahora es un enfoque total en la recuperación y pronto estoy de regreso! Gracias a todos por los mensajes", escribió el joven extremo brasileño, que cumple 20 años el próximo mes de enero, en su perfil de Instagram.

"Fuerza hermano, vas a volver mejor que antes", le respondió Vinicius, su compatriota y sobre todo amigo en el vestuario del Real Madrid y también fuera de él. El propio 'Vini' sabe muy bien lo que es pasar por una lesión cuando las ganas por triunfar de blanco son enormes, algo que le pasó a él en su primera campaña en el Santiago Bernabéu.

Un freno a Rodrygo

Frenazo en seco a la progresión de este joven futbolista que está a punto de cumplir 20 años y que llegó con 18 a la casa blanca procedente del Santos. En este tiempo, ha demostrado tener un particular idilio con la Champions League y se espera que, en el mejor de los casos, pueda estar listo para la eliminatoria contra el Atalanta de los octavos de la máxima competición continental.

Todavía es una incógnita cuánto tiempo permanecerá alejado de los terrenos de juego Rodrygo. Pero el Real Madrid pierde a un jugador eléctrico, de los jugadores especiales que recorren la banda y ponen en aprietos a las defensas rivales con sus incursiones por banda. Ahora el madridismo solo espera verle lo antes posible otra vez con el equipo.

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