El Real Madrid ha tenido un gran problema esta temporada. Más allá del juego o de los malos resultados en fases de este curso, las lesiones han lastrado al conjunto merengue esta campaña. La gran mayoría de los futbolistas han visto como tenían que parar en mayor o menos medida por los problemas físicos, lo que ha hecho que no puedan tener una regularidad en su juego.

Pero si hay una línea que ha sufrido estos problemas, esa ha sido la defensa. Todos los zagueros de la entidad de Concha Espina han sufrido lesiones este curso, lo que ha impedido que Julen Lopetegui primero, y ahora Santi Solari puedan trabajar con normalidad. Los dos técnicos han tenido que lidiar con las diferentes bajas de sus defensas, ya sean centrales o laterales, durante este curso.

De hecho, el argentino ha tenido que tirar de cantera por estos problemas. Javi Sánchez ha completado multitud de convocatorias de Solari en los últimos meses, dejando de lado al primer filial madridista temporalmente. El central incluso ha llegado a jugar ante el Melilla en los dieciseisavos de la Copa del Rey y el CSKA de Moscú en la Champions League.

Sin embargo, por primera vez esta temporada, Santi Solari puede ver una luz al final del túnel. El extécnico del Castilla por fin cuenta con todos los centrales de su plantilla sanos y salvo. El argentino al fin podrá alinear a los que crea convenientes o teniendo en cuenta la necesidad de descanso para los jugadores con más minutos jugados en lo que va de curso.

Nacho, la última incorporación

El último en recuperarse de su lesión ha sido Nacho Fernández. El canterano se lesionó en el partido disputado por el Real Madrid en Balaídos ante el Celta de Vigo. El central ya está listo, recuperado y ha vuelto con sus compañeros justo antes del inicio del Mundial de Clubes, por lo que Solari ya cuenta con un arma más para la defensa.

Hasta el momento, Nacho todavía no ha podido jugar. Ante el Kashima Antlers se quedó en el banquillo, pero por su polivalencia y regularidad en el juego, su regreso es una gran noticia para su entrenador. Por ello, Solari no arriesgará e irá introduciendo poco a poco al de Alcalá de Henares en juego, para evitar posibles recaídas en las próximas semanas.

Un mes de enero muy exigente

Poder contar con todos sus jugadores hace que Solari pueda respirar tranquilo de cara al próximo mes de enero. El argentino tiene que pensar cuál es la mejor manera de afrontar un mes que estará abarrotado de partidos, comenzando el día 3 de enero frente al Villarreal.

La entidad de Concha Espina afronta un mes en el que la Copa del Reyy La Liga toman todo el protagonismo. Si en la competición copera van pasando rondas hasta la final, el Real Madrid tendrá dos partidos por semana hasta final de mes, por lo que contar con todos sus efectivos en defensa es vital para mantener a sus futbolista de la mejor manera y sin agotarlos innecesariamente.

El reto de Solari con la defensa

Ahora el desafío de Solari es mantener, en la medida de lo posible, a sus jugadores sanos y salvos. Sabiendo que es un reto imposible, trabajara junto a Pintus para preparar a los jugadores físicamente y que estén a tope para una duro 2019 en el que todavía tendrán tres títulos en juego.

El extécnico espera que todos sus defensas, desde Sergio Ramos hasta Reguilón eviten los serios problemas que han sufrido hasta la fecha. Será la única manera de que el técnico del Real Madrid pueda planificar la temporada sin sobresaltos y sin tener los quebraderos de cabeza que ha sufrido hasta la fecha, en los que, en ocasiones, han contado solo con cuatro defensas para algunos partidos.

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