En la temporada 2016/2017, Kylian Mbappé irrumpió con fuerza en el panorama del fútbol mundial. El francés llevó al Mónaco a conseguir la Ligue 1 y llegar a las semifinales de la Champions League. Su gran temporada hizo que varios de los clubes más importantes de Europa quisieran hacerse con sus servicios, entre los que se encontraba el Real Madrid.

De hecho, según ha desvelado ahora Football Leaks, el conjunto blanco estuvo muy cerca de conseguir la contratación del futbolista francés en el verano de 2017. La entidad de Chamartín llegó a un acuerdo con el Mónaco por el traspaso de Mbappé al Real Madrid a cambio de 180 millones de euros. Con el paso de las negociaciones, ambos clubes descubrieron que tendrían que pagar otros 34 en impuestos, cantidad que el conjunto del Principado se negó a abonar y el cuadro merengue aceptó hacerlo, subiendo el precio a 214 millones de euros.

Todo estaba listo para que en julio se cerrara el acuerdo, sin embargo, el PSG entró en juego. Mbappé, que estaba dispuesto a vestir de blanco, decidió cambiar de opinión y prefirió quedarse en París, algo que a su club no le hacía mucha gracia porque reforzaría a un rival directo. Sin embargo, ante la insistencia del futbolista, decidieron aceptar su marcha al cuadro presidido por Al-Khelaïfi a cambio de que aceptaran pagar los 180 millones que ofrecía el Real Madrid, y lo demás ya es historia.

Mbappé frente al Lille CHRISTOPHE PETIT TESSON Agencia EFE

Las condiciones de Mbappé

El futbolista fue el que decidió que su salida del Mónaco fuera finalmente al PSG, sin embargo, no quería hacerlo a cualquier precio y presentó varias condiciones al conjunto parisino, donde ya ha vivido sus primeros problemas. El futbolista quería cobrar diez millones por año, pero el club francés consiguió que aceptara un contrato progresivo, pagándole siete 'kilos' la primera temporada, algo más de nueve esta temporada y un millón más al año hasta llegar a los doce en su última temporada.

Sin embargo, no todas las peticiones fueron aceptadas. Mbappé exigió que, si conseguía ganar el Balón de Oro, pasaría a cobrar más que Neymar, que alcanza los 30 millones de sueldo, algo que en el PSG no aceptaron. También se le denegó una cláusula compensatoria si el club era expulsado de la Champions por incumplimiento del Fair Play Financiero.

Sin embargo, lo más llamativo es su solicitud de contar con 50 horas al año en un jet privado, algo que volvió a ser rechazado por el PSG. Sin embargo, como compensación, el club aceptó costearle 30.000 euros al año para pagar el alquiler de una casa y la contratación de un mayordomo, un chofer y un guardia de seguridad para su nuevo hogar.

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