El Real Madrid comenzó bien la temporada con la consecución de las dos Supercopas. Sin embargo, los dos empates consecutivos hacían que las primeras críticas del curso salieran a la luz. Zidane fue el objeto de algunas de ellas. El técnico galo tuvo que ver cómo, tras conseguir multitud de éxitos con su filosofía en poco más de año y medio, se ponían en duda sus rotaciones.

Sin embargo, tras el partido de Anoeta, el entrenador francés ha vuelto a callar todas estas bocas. Zidane volvió a demostrar que los cambios que hace en cada partido sirven para tener a todos enchufados y listos para cuando les necesita. Los ejemplos últimos y más claros son Mayoral, el mejor jugador del duelo, y Theo, que consiguió que no se notara la baja de Marcelo.

SU FILOSOFÍA NO SE TOCA

Zidane sabe que tiene por delante una dura temporada. Cuatro títulos tiene en juego, más los dos conseguidos ya en el mes de agosto, y necesita a toda su plantilla lista para la acción. Desde Keylor hasta Mayoral deben estar en perfectas condiciones para saltar al campo cuando les necesite. Por ello, el técnico madridista seguirá apostando por sus renovaciones como la clave del éxito, sin que nada ni nadie le pueda hacer cambiar de idea.

Zidane: "Mi renovación está hecha" by footbie.com